Cuenteros internacionales dan una muestra de sus tradiciones orales

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El camerunés Boniface Ofogo y la española Esther Yamuza fueron los invitados internacionales en esta decimonovena edición.

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06 sep 2016

Historias y anécdotas del mundo llegaron hasta la media torta de la Biblioteca Karl C. Parrish el miércoles, 31 de agosto, por cuenta de la programación universitaria del Festival Internacional de Cuenteros El Caribe Cuenta; evento que celebró su decimonovena edición entre el 28 de agosto y el 3 de septiembre.

Este año el festival contó con la participación de 12 cuenteros, entre nacionales y extranjeros, que se presentaron en diferentes recintos de Barranquilla, Galapa y demás municipios del Atlántico, para crear en cada lugar una verdadera fiesta de las palabras. En la Universidad del Norte, la española Esther Yamuza, y el camerunés Boniface Ofogo, fueron los invitados internacionales que encantaron al público con sus narraciones orales, las cuales reflejaron las tradiciones de sus países.

El evento inició con la presentación de Esther Yamuza, quien ofreció dos narraciones de su espectáculo llamado “Cuentos de Maricastaña”, con el que busca rendir un homenaje a sus propios abuelos, y a todos aquellos que aún le cuentan historias a sus nietos.

Para esta narradora proveniente de Andalucía, la inspiración para sus presentaciones proviene de la lectura, con la que siempre puede encontrar nuevas obras para enriquecer su repertorio. A su parecer los cuentos tienen una gran relevancia cuando son presentados de forma oral, ya que conceden al oyente un espacio en el presente. “No hay pantalla, ni tampoco hay forma de atrasar o adelantar el tiempo que se vive, y ese es el valor más importante que para mí tiene la narración oral”, dijo Yamuza.

Por su parte, Boniface Ofogo, quien además de narrador oral es doctor en Filología Hispánica de la Universidad Complutense de Madrid, aseguró que el oficio de la cuentería tiene grandes implicaciones sociales que resultan importantes para la sociedad actual.

“La cuentería es un arte grupal, es un arte que convoca a la comunidad, y en una sociedad en la que estamos aislados por las redes sociales, las narraciones orales permiten romper con eso, y nos convoca a las plazas; así es como recuperamos los instintos primarios del ser humano”, manifestó Ofogo.

Para dar una muestra de ello, el cuentero nacido en Camerún utilizó su voz y gestos en escena, para que los  presentes hicieran un viaje imaginario hasta África, cuna de la humanidad y de la oralidad. Él logró tener al público en total concentración, con un cuento que hablaba de las aventuras de un cazador que con ayuda de la magia y de su hijo de siete años, logra derrotar a un grupo de monstruos que asechaban su aldea.

Ofogo también recuerda que empezó a narrar fábulas y cuentos desde 1991, y asegura que su principal motivación para hacerlo es “contar el África que los demás no cuentan, y presentar sus aspectos ocultos es lo que quiero mostrar a través de la tradición oral”, puntualizó.

Por María Margarita Mendoza

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