El plan de siembra fue diseñado años atrás con el criterio de recuperar especies nativas en peligro de extinción; contó con el apoyo del Jardín Botánico de Cartagena, colectas anuales y donaciones. Las especies se recopilan en el vivero de Uninorte y cuando cumplen cierto tamaño se procede a su plantación. De esta manera se contribuye a la formación en competencias ambientales, pero también cumple una función científica: proteger y estudiar las especies en vía de extinción.   

De acuerdo con el profesor Joachim Hahn, la importancia del plan de siembra institucional radica en su componente educativo, pues la institución siempre ha sido consciente de que “el campus debe educar” y que “un árbol es un instrumento para formar a la comunidad en general”.

El Museo Vivo de nuestro Ecocampus alberga 75 especies de árboles, el 65 % son nativas de la región y el otro 35 % son originarias de otros países. Por esta gran variedad de flora, el campus se ha convertido en una gran aula de clases donde los estudiantes desarrollan sensibilidad para conservar la naturaleza y aprenden sobre la vegetación propia de ecosistemas locales.

“Desde hace años la universidad hace esfuerzos muy sistemáticos para no solo cuidar, sino ir ampliando el número de árboles que existen en el campus, y llevamos un control riguroso de las especies. Hoy, con la siembra de este ébano, me complace mucho ver que hacemos un esfuerzo institucional por mantener el número de árboles y aumentar la diversidad”, manifestó el profesor Hahn.