El Departamento de Historia y Ciencias Sociales de la Universidad del Norte, en colaboración con la Universidad de Utrecht, en Holanda, realizó durante el segundo semestre un proceso de ‘Aula interconectada’, a través de la asignatura Sociedad y Ambiente (Uninorte) y el curso de maestría Introducción a la Ecología Política del Instituto de Copernicus para la Sostenibilidad, con el objetivo de crear una alianza interinstitucional y brindar una experiencia a los estudiantes y docentes que beneficiara los procesos de enseñanza y aprendizaje con una perspectiva intercultural.  

Durante el desarrollo del aula participaron 11 estudiantes de la Universidad del Norte, incluidas tres estudiantes de intercambio, y 30 estudiantes de la Universidad de Utrecht, Holanda, quienes buscaban entender que los problemas ambientales son problemas políticos y económicos, y cómo las relaciones entre ambiente y sociedad son mediadas por el poder, expresadas en formas de desigualdad, exclusión, marginalidad y despojo. Para ello abordaron temas como el cambio climático, los desastres, la justicia ambiental, el extractivismo, la agricultura, entre otros. 

Alejandro Camargo, profesor del Departamento de Historia y Ciencias Sociales, quien lideró la iniciativa desde Uninorte, explicó que la experiencia de aula interconectada inició en grupos que buscaban comparar temas medioambientales en ambas ciudades. Durante las sesiones grupales se compararon temas como los sistemas de drenaje, los zoológicos y sus significados dentro de las ciudades, las contradicciones históricas que se reflejan en los zoológicos, entre otros. 

En el desarrollo de las clases usaron herramientas como Instagram, donde publicaban materiales visuales para que, desde ambos países, los estudiantes e interesados pudieran ver los productos de desarrollo e investigación de las clases. 

“Fue una experiencia novedosa aprender a usar el Instagram como una herramienta para aprendizaje en el aula”, puntualizó Camargo. 

Uno de los temas tratados durante las aulas fue las problemáticas que rodean a la Ciénaga de Mallorquín, en donde “los estudiantes vieron los conflictos ambientales, las diferentes formas de desigualdad, inequidad y exclusión que se presentan a la hora de crear ecoparques, como el que está en construcción, y cómo es la forma de gobernanza de estos ecosistemas en donde vive y trabaja mucha gente, y a su vez son atractivos para el turismo y la administración municipal”. 

Durante el recorrido en la Ciénaga, los estudiantes tuvieron la oportunidad de hablar con algunos pescadores de la zona, quienes les compartieron su opinión sobre el ecoparque y cómo visualizan el futuro en la Ciénaga. Además, durante su instancia, los estudiantes sembraron mangles para apoyar las campañas de siembra de mangles. 

 

 

 

 

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"Los estudiantes se pudieron dar cuenta que un proyecto como el Ecoparque Ciénaga de Mallorquín, que es visto como un proyecto de interés general, puede atraer turismo, generar infraestructuras verdes y fomentar la economía local, pero también puede ser una fuente de conflictos e incertidumbres dentro de las comunidades que habitan este ecosistema”, mencionó Camargo. 

“Las aulas fueron una experiencia de internacionalización de la Universidad del Norte para incrementar su visibilidad a nivel global, en especial con universidades en países donde tenemos intereses comunes como son los recursos acuáticos, los ríos, las ciénagas y en general el agua, como un espacio de aprendizaje, investigación y producción de conocimiento”, finalizó Camargo.