Alcalde analiza con nuestros docentes de Salud la nueva etapa de manejo de la pandemia

La realización de pruebas diagnósticas de COVID-19, el desarrollo de campañas educativas para concientizar a la población, la capacidad hospitalaria y el trabajo conjunto entre los sectores y la ciudadanía son las principales estrategias que se deben seguir fortaleciendo en el Distrito de Barranquilla, para mitigar el incremento de la tasa de mortalidad y hospitalización generada por la pandemia. Así lo indicó Hernando Baquero, decano de la División de Ciencias de la Salud de la Universidad del Norte, durante un conversatorio en el que él y los profesores Jorge Acosta y Julián Fernández, de la misma unidad académica, analizaron con el alcalde Jaime Pumarejo el comportamiento del virus en la ciudad y el panorama al que la población debe prepararse en los próximos meses.

Durante la sesión virtual, transmitida a través del canal de Youtube Alcaldía de Barranquilla, el alcalde hizo un llamado a la ciudadanía a aprender a convivir con el virus y salir a trabajar de manera segura, entendiendo que la situación durará meses y todavía no hay una vacuna o cura a corto plazo. Señaló que Barranquilla se encuentra en la fase de atención, en donde se procura garantizar el cumplimiento del aislamiento preventivo, y que avanza en la fase social, donde el foco de atención va a la población vulnerable casa a casa y se han entregado cerca de 81 mil auxilios alimentarios. Para la fase económica o de recuperación, Pumarejo indicó que se han creado líneas de crédito y establecido protocolos para volver al trabajo rápidamente, recordándole al ciudadano que debe hacerlo de forma responsable.

“Colombia está en una fase muy temprana de la pandemia. La cuarentena es una medida de supresión que frenó el incremento de la curva antes de que comenzara, aplazó el pico. Pero probablemente vayamos a tener varios picos porque se van a aplicar cuarentenas intermitentes. Asumamos que nos vamos a contagiar todos, pero hagamos todo lo posible para que suceda lo más lento y lejos posible”, señaló Julián Fernández, docente del departamento de Salud Pública y doctor en Epidemiología.

Hasta la fecha, Barranquilla se mantiene en un rango de 73,21 casos confirmados de personas con la enfermedad y 2,17 fallecidos confirmados por cada 100 habitantes. En las últimas semanas la ciudad ha registrado una tasa de contagio mayor a la que venía manteniendo, lo cual estaba dentro de las previsiones. De las 7300 pruebas que se han tomado en el Distrito, 917 dieron positivo, 33 (4%) personas están en hospitalización y 7 de ellas en una Unidad de Cuidados Intensivos.

“Estamos buscando activamente a los contagiados, es decir, aislarlos más rápidamente porque es la única manera de solucionar esta pandemia. Cuando las encontramos, les hacemos pruebas a sus familiares y a las personas con las que tuvo contacto, lo que nos permite identificar rápidamente los casos. Cuando identificamos muy tarde, ya no puedes tratarlos porque sube tu tasa de mortalidad y hospitalización”, argumentó el alcalde.

Para Baquero, es necesario también tener presente que en los últimos 60 días la población se ha mantenido en un confinamiento y los adultos mayores han estado guardados en sus casas. Es decir que, en la medida que se dé la apertura económica en la ciudad, mucha gente probablemente regresará a sus hogares con el virus y contagiará a adultos mayores. “El porcentaje con el que cimentamos nuestra tranquilidad, que es la baja ocupación hospitalaria, puede empezar a dispararse. Tenemos que estar atentos a todas estas estrategias que están montadas desde la Alcaldía Distrital para empezar a identificar esos clúster de personas en riesgo, y cómo empezamos a hacer intervenciones puntuales”, recalcó el decano.

Uno de los indicios a tener en cuenta es cuando el número de días en los que se duplican los casos de contagio confirmado se hacen más cortos, pues prenderá las alarmas. El tema de letalidad también es clave porque da señales de cómo está funcionando las red de servicios hospitalarios, y si el tiempo en que la población estuvo en cuarentena para mejorar los servicios de salud realmente funcionó.

“En América Latina tenemos la oportunidad todavía de estar viviendo todo esto en un momento más tardío que lo que ha pasado en Asia y Europa. Tenemos que aprender de las estrategias que han funcionado en estos países, pues deberían replicarse en Colombia”, concluyó el profesor Acosta, director del Departamento de Salud Pública de Uninorte.

Por José Luis Rodríguez R.