Alianza por la educación de La Guajira

Como respuesta a los objetivos planteados en regionalización y apropiación social de las investigaciones y conocimientos generados durante sus 15 años, el Observatorio de Educación de Estudios del Caribe (OECC) realizó una alianza con el Centro de Pensamiento para el Desarrollo Guajira 360, con la finalidad de exponer de manera analítica los indicadores disponibles en torno al estado actual del servicio educativo del departamento.

En el marco de este acuerdo se realizó el 25 de abril el primer conversatorio en Riohacha, en el que se presentó el informe de investigación que da contestación a los retos y desafíos a nivel de la educación preescolar, básica, media y superior de La Guajira. Asistió la Secretaría de Educación, docentes y miembros de la comunidad educativa de la Universidad de la Guajira.

“Esta es una oportunidad que tiene Uninorte para que desde la generación de conocimiento, producto de sus investigaciones, brinde un servicio de desarrollo social a la región Caribe”, explicó Jorge Valencia, coordinador de OECC.

¿Cuáles fueron los principales retos encontrados?

En La Guajira se ubican aproximadamente 1096 sedes educativas, de las cuales 976 pertenecen al sector oficial y atienden un 92 % de la matíicula total, es decir, 203 229 estudiantes.

“Lo que nos preocupa es encontrar que de cada 100 niños que van a la escuela, solamente 64 llegan a la educación secundaria, 11 terminan el bachillerato y solo 5 alcanzan a tener un título en educación superior”, enfatizó Valencia.

Manifestó que en indicadores de calidad de aprendizaje han mejorado los resultados en competencias de lectura crítica y competencia ciudadana. Sin embargo, se encuentra por debajo de los niveles deseables a nivel nacional y regional: “6 de cada 10 niños guajiros no alcanzan a realizar operaciones básicas matemáticas”, puntualizó.

Otros desafíos en la educación del departamento se deben a la cosmovisión de los guajiros y las comunidades wayúu. “Se debe pensar en estrategias que respeten la identidad cultural de las diferentes etnias, sobre todo elementos relacionados con la concepción sobre la infancia y su formación en los primeros años de vida”, indicó Valencia.

Sobre los retos, el coordinador destacó que es importante trabajar primero en el desarrollo de las competencias básicas de los estudiantes. Segundo, fortalecer la investigación científica y la generación de nuevos conocimientos, y por último generar vínculos con el sector productivo e incentivar el emprendimiento y la innovación.

“Es importante que este conocimiento llegue a las bases sociales y desde estas se le demande a los mandatarios que orienten las decisiones hacia el desarrollo y el cambio educativo”, concluyó.

Por Génesis Navarro.