April Ginther, una aliada del Instituto de Idiomas en la transformación pedagógica

La historia reciente de la enseñanza de idiomas proviene de una tradición europea de varios siglos atrás, en la que académicos aprendían para poder leer textos escritos por autores de otros países. Siguiendo esta línea, las evaluaciones hacían énfasis en una correcta gramática, necesaria para poder comprender la lectura. Hasta el día de hoy, esta herencia no ha cambiado del todo en la enseñanza de lenguas. 

El Instituto de Idiomas de la Universidad del Norte reflexionó sobre estas prácticas hace varios años y llevó a cabo un proceso de renovación tanto de los ejercicios pedagógicas como de las estrategias evaluativas. En este camino se ha encontrado con aliados como April Ginther, docente de la Universidad de Purdue y experta en el diseño de evaluaciones educativas. 

Desde hace tres años la norteamericana ha venido a dictar talleres en creación de exámenes, diseño de rúbricas y evaluación del programa de inglés a docentes de Uninorte. “Es una relación en la que nos beneficiamos ambas instituciones, valoramos el trabajo que hacen y nos sentimos honrados y privilegiados de contribuir en cualquier manera”, comentó la visitante, que estableció su relación a través del profesor Rodrigo Rodríguez, quien fue su estudiante doctoral. 

Ginther señaló que tradicionalmente, en la enseñanza de otras lenguas, no se esperaba que fuera utilizado para hablar con otros. No obstante, en el contexto actual este es el uso central. Por ello, la docente propone la evaluación basada en el desempeño. 

Se necesita tener en cuenta varios aspectos, pero la clave es que se evalúe el dominio. “Paso mucho tiempo haciendo que mis estudiantes piensen sobre cómo tener buenas rúbricas, cómo armar un exámen, o cómo quieren evaluar el desempeño”, dijo, pues no se trata simplemente de cambiar sin tener una estrategia precisada previamente. Añadió que es crucial estar consciente cuáles son las rúbricas a evaluar para tener presente qué tan efectiva es la práctica pedagógica. 

Puso el ejemplo de la evaluación de un discurso por sobre una prueba gramatical. El primero es más dificil de ponderar y para ello, el docente debe pensar y jerarquizar cuáles son las características de un buen discurso, para saber cómo dar una calificación. Para ello se pueden conectar, de manera individual, aspectos de la presentación del estudiante directamente al resultado final de la evaluación y hacerlo explícito al salón de clases para que haya un sentido de justicia. 

Ginther manifestó que en sus tres años de colaboración con Uninorte ha visto al programa en constante evolución y abierto a implementar estrategias de vanguardia. Resaltó que los grandes triunfos del Instituto de Idiomas son la importancia que se le ha dado a la pedagogía y su capacidad de diseño y evaluación de programas educativos. 

Por Leonardo Carvajalino