Con análisis en torno al impacto social, expertos celebran los 10 años de Univoluntarios

A través de las diferentes actividades de impacto social que dan cuenta de la importancia del voluntariado universitario, el programa Univoluntarios celebró el 28 de noviembre sus diez años de fundación con la realización del Seminario de Voluntariado Universitario y Cambio Social, en el salón 13G2.

Este gran cierre contó con invitados nacionales e internacionales, como Katiusca Antequera, jefe de la Oficina de Participación Ciudadana de la Alcaldía de Barranquilla; Enrique Ochoa, director ejecutivo del Centro Latinoamericano de Aprendizaje y Servicio Solidario; profesores y colaboradores de la institución.

“Se convierte en un espacio para que todo reflexionemos sobre las cosas voluntarias que hemos realizado en 2019 y además compartamos la experiencia con otras universidades, empresas y instituciones que tengan voluntariado”, afirmó Yuliana Gómez Giraldo, coordinadora del programa de Formación Integral del Univoluntarios.

Para el vicerrector académico, Joachim Hahn, los 10 años del programa Univoluntarios tiene varios significados importantes. “Son muchos estudiantes que han sido beneficiarios de este programa, pero también es un momento para reflexionar muy responsable y seriamente sobre el sentido que tiene el voluntariado en una universidad, particularmente en este momento que ha habido tantas marchas y manifestaciones de inconformidad de los estudiantes universitarios. Es necesario preguntarse: ¿el voluntariado qué tanto está ayudando a resolver esas necesidades que tienen los estudiantes de tener un impacto en las sociedad?”, cuestionó el biólogo.

La agenda académica inició con la conferencia “Aprendizaje y servicio solidario como propuesta pedagógica: aprender desde la propia experiencia”, a cargo de Enrique Ochoa, director ejecutivo del Centro Latinoamericano de Aprendizaje y Servicio Solidario. El conferencista explicó el servicio - aprendizaje, una propuesta pedagógica de su centro en busca de experiencias que ya existan en educaciones con una vinculación curricular de los aprendizajes y con el perfil de egresados que buscan en las instituciones.

“El compromiso social no es visto como un tercer pilar, sino como una aproximación a nuestras actividades de enseñanza e investigación (…) Para nosotros enseñar ciudadanía no se hace desde el aula, el compromiso social no se enseña en pizarrón, hay que confiar y salir a la sociedad para trabajar en la construcción de los problemas del hoy”, concluyó.

“Cada vez más estamos generando mayor participación de los docentes y los estudiantes y, sobre todo, hemos agregado y empezado a trabajar con el tema de investigación apoyando a los docentes y estudiantes doctorales, al igual que un trabajo en red con los voluntariados de la Región Caribe”, indicó la directora.

Paralelamente, la psicóloga Yuliana Gómez presentó una ponencia sobre los “orígenes del voluntariado en Barranquilla”. Durante la jornada de la tarde se realizaron cinco talleres simultáneos acerca de los retos y oportunidades de los programas de voluntariado del MAITE, dictado por Ana Liliana Ríos; lectura para la imaginación, dictado por Kelly Pozo; intervención social ¿cómo ser mejor?, por Belkis Cifuentes; evaluación de programas sociales, por Zulmary Palma; e inclusión y voluntariado, presentado por Paola Alcázar.

Además, un panel de Experiencias Significativas, dictado por Yesica Morales Pautt, coordinadora de Transformación Social del Programa Univoluntarios; la ponencia del doctor Alexander Villarraga sobre el “Voluntariado universitario y emprendimiento social”, y una entrega de reconocimientos, otorgado por la universidad a las organizaciones por su trayectoria e impacto del trabajo realizado.

Fundación TECHO, Fundación Buenamar, Fundación Puerto de Barranquilla, Fundación Acesco, Fundación Mario Santo Domingo, Fundación Rotaria Barranquilla, Centro Fundación Social para el Desarrollo Integral del Ser Humano en la Sociedad, Fundación Procaps y Voluntariado Procaps, Fundación Promigas, Soraya Lewis, Ana Liliana Rios, Carolina González, Edgard Rincón, Liliana Mendoza y Cecilia Pérez de Vigna, fueron las empresas y las personas galardonadas.

Transformando vidas

El programa Univoluntarios surge como una respuesta muy específica que se estaban presentando en la academia: cómo los chicos querían que su profesión tuviera un impacto social. “Es una apuesta de la universidad por ser un espacio en donde el voluntario se forma integralmente y a su vez genere procesos de construcción en la comunidad, logrando impactar alrededor de más de 10.000 personas de manera directa”, puntualizó Gómez.

La coordinadora enfatizó en que el reto para el próximo año es alto para los más de 2000 voluntarios que hacen parte del programa, “la idea es que se convierta en un voluntariado referente en la Región Caribe, obteniendo un gran impacto en las comunidades”, afirmó.

Por Laura Hernández.