“El fracking ha sido un caballito de batalla político”: ANH

Tres invitados, tres perspectivas de los retos energéticos que vienen en el futuro. En la tarde del 1 de noviembre la perspectiva nacional, regional y distrital fueron el enfoque en el conversatorio que se llevó a cabo en el salón 33E, en el  marco de la VI Cátedra de Economía del Caribe.

“En los últimos cuatro años no se ha celebrado ningún contrato de exploración y la producción que teníamos de más de 1.500 millones de barriles de petróleo diarios ha caído a 850.000 barriles”, resumió el panorama Luis Miguel Morelli, director de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) desde septiembre. Según el exgobernador de Santander, si seguimos al ritmo de consumo que tuvimos en el 2017, Colombia tendría reservas para cinco años.

La Agencia Nacional de Hidrocarburos administra el recurso del subsuelo y por tanto está facultada para adjudicar los contratos. Morelli afirmó que una de las metas de la agencia será restablecer las reservas de petróleo, y ofreció opciones como yacimientos no convencionales, offshore y la aplicación de mejoras tecnológicas para una optimización en la extracción.

Con respecto al fracking, aseguró que ha sido “un caballito de batalla político”. Afirmó que el éxito que ha tenido Estados Unidos, en el que hay más de 10.000 pozos con fracturación hidraúlica que lo han convertido en el primer productor mundial de petróleo, ha llevado a que motivaciones políticas sean el argumento en contra. “A Rusia no le interesa que los demás países comiencen a producir porque eran el primer productor. Ahí hay un tema geopolítico que está detrás de todo esto, no es un tema ambiental”, aseguró el director de la Agencia Nacional de Hidrocarburos.

“Hay que llevar el debate al tema técnico y no al político”, agregó Morelli, quien tiene 20 años de experiencia en el área de hidrocarburos. Sobre las fuentes de energía renovables, dijo que han ganado terreno pero que se ha proyectado que todavía en el 2040, el 75% de la energía que se produzca en el mundo será proveniente de combustibles fósiles (gas y carbón).

El Caribe y sus retos

El 25% de la demanda de energía del país proviene de la región Caribe. Para Andrés Yabrudy, presidente de Gecelca, esto es una buena señal, pues muestra progreso y desarrollo, así como también preocupante, si no hay como suplir esta creciente demanda. Y, desde 2022, si no comienza a funcionar el megaproyecto de Hidroituango, la región deberá hallar soluciones alternativas para suplir su demanda.

Con respecto a las energías renovables observó que hay que “ir en ese tránsito” pero que actualmente no es fácil sostener un proceso productivo solamente con energías alternativas y aseveró que el gas natural, por temas de “practicidad”, es una de las soluciones del futuro.  

Según Yabrudy, existe un gran potencial de recurso solar y eólico en la región, además de las reservas de carbón y la posibilidad de extraer gas natural offshore. No obstante, observó debilidades en la red de distribución, la cual es muy frágil, y mostró especial preocupación por el tema Electricaribe.

Un operador que invierta

La secretaria de planeación del distrito, Margarita Zaher, habló sobre el proceso de Electricaribe y lo que se viene a futuro en la elección de un nuevo operador. Actualmente los usuarios de la región Caribe experimentan un promedio de 112 horas sin luz al año. Para mejorar esta situación se requiere de una inversión de 7.6 billones de pesos en 10 años. En caso tal de que el plan se realizara, se pasaría a 51 horas de apagón al año, aún por encima de las 16 horas que experimentan en capitales del país como Bogotá y Medellín.

Esta situación es uno de los retos para este nuevo operador que reemplazaría a Electricaribe, intervenida por el estado en 2016. Desde entonces, según contó Zaher, se han invertido 8.6 billones de pesos, de los cuales el 68% se han utilizado para comprar energía, y sólo 2.5% para mejoramiento de infraestructura, la prioridad número uno de la región para mejorar el servicio.

La jefa de la cartera mostró además por qué no es viable que los usuarios paguen esta inversión vía alza de tarifas. En primera instancia, los altos niveles de pobreza de la región que se combinan con las altas tarifas que pagan, pues el 30% de los hogares estrato 1 y 2, pagan más de $100.000, muy por encima del 10% del promedio nacional.

“La situación es preocupante, las soluciones planteadas no son buenas, sin embargo el Gobierno Nacional tiene a su cargo Electricaribe y es responsabilidad de ellos garantizar un suministro competitivo en la Costa. Electricaribe es un problema de orden nacional”, cerró su intervención Zaher.

Por Leonardo Carvajalino