Estudiantes de Arquitectura ganan premio internacional de vivienda modular

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Alejandro Vergara, Kuang Qian, Moisés Marenco y Carlos Caro son estudiantes de sexto semestre de Arquitectura.

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02 nov 2018

El diseño de una casa de arquitectura modular, o prefabricadas como coloquialmente se les conoce, hizo merecedores a cuatro estudiantes del departamento de Arquitectura y Urbanismo del segundo lugar en el concurso internacional inHAUS LAB, organizado por la firma española Casa inHAUS. Alejandro Vergara, Moisés Marenco, Carlos Caro y Kuang Qian, todos de sexto semestre, fueron los merecedores del galardón por su proyecto denominado FLEXHAUS.

La curiosidad por trascender del aula de clase su formación como arquitectos, llevó a cuatro jóvenes a descubrir un concurso internacional en el diseño de casas con arquitectura modular. “El concurso llegó a nosotros a partir de la misma curiosidad de buscar en redes sociales y en internet, eventos en los cuales pudiésemos participar para retarnos y aprender”, contó Carlos Caro, integrante del grupo.

inHAUS LAB es un concurso que busca el diseño de casas modulares a partir de propuestas creativas e innovadoras, Casa inHAUS, empresa organizadora de la actividad, es líder en el diseño y construcción de casas en España. Por esta razón el primer paso de los estudiantes fue hacer un estudio sobre la propuesta de valor de dicha empresa en ese país para conocer de qué forma su propuesta podría complementar esa oferta. “Encontramos que había una oportunidad de combinar la versatilidad del diseño y construcción de casas modulares con la posibilidad de que el espacio también fuese flexible para futuras modificaciones según los intereses del propietario”, explicó Moisés Marenco, quién además añadió que eso dio origen al nombre de su propuesta ‘FLEXHAUS’.

“Otro de los temas que quisimos destacar en nuestro proyecto fue el componente bioclimático sobre el que se hace tanto énfasis en nuestra formación de la Escuela de Arquitectura”, contó Alejandro Vergara. Esto los llevó a un proceso de análisis de materiales, técnicas y bocetos para lograr un buen resultado.

A pesar de que el producto final a entregar fuese digital, los bocetos a manos no podían hacer falta en el proceso. “Dibujar a mano no solo brinda mayor libertad creativa sino que es menos agotador que estar frente a la pantalla del computador”, comentó Kuang Qian. Además, las piezas Lego también ayudaron al proceso de crear e imaginar los espacios.

Los estudiantes participaron con otras 170 propuestas que provenían de todo el mundo, y no participaron sólo estudiantes sino profesionales graduados (máximo del año 2014), lo que es motivo de orgullo para ellos ya que se enfrentaron a personas que ya están en ejercicio y les demostró que ya cuentan con herramientas suficientes para asumir esos retos.

La propuesta de valor de la ‘FLEXHAUS’ es que “además de estar elaborada con módulos que facilita su construcción, la casa tiene un diseño que permite su ampliación o modificación a futuro porque permite el ensamble de nuevas piezas”, contó Kuang Qian. Quien emocionado expresó que toda la experiencia fue un constante aprendizaje de muchas cosas que complementan la educación que recibe en la universidad.

FLEXHAUS: Proyecto de vivienda diseñado por estudiantes de Arquitectura


Durante el mes que tomó el proceso de diseño de la casa, los estudiantes no estuvieron solos. El profesor Sergio Chririvella, del departamente de Arquitectura, apoyó a los estudiantes en todas las dudas que surgían en el camino y les brindó recomendaciones que fueron claves para el proceso. “El profesor es español y eso nos ayudó a comprender el contexto en el que estas casas son construidas y las diferencias culturales que pueden haber al momento de disponer los espacios”, contó Alejandro Vergara.

Los estudiantes resultaron merecedores del segundo puesto, luego de someter los proyectos a una votación online en la que las personas observaban los proyectos y escogían el de su preferencia. Allí contaron con el apoyo de la coordinación de programa para la divulgación de su propuesta. Obtuvieron un premio monetario pero más allá de eso los cuatro coinciden en que la experiencia de trabajo en equipo y los aprendizajes es el mejor premio de todo esto.

La premiación se llevará a cabo el próximo 9 de noviembre, aún no tienen claro si viajarán a recibirlo. Sin embargo se encuentran satisfechos y con el ánimo suficiente para emprender nuevos retos. “El trabajo en equipo fue esencial porque las virtudes de uno suplían las debilidades del otro”, sentenció al final Carlos Caro.

Por Omar David Alvarez

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