La prueba de las políticas públicas frente a la COVID-19

‘Políticas públicas en tiempos de pandemia’ se denominó al más reciente conversatorio realizado por la División de Derecho, Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales, a través del canal de Youtube Uninorte Académico, en el que sus profesores Ángel Tuirán y Luis Fernando Trejos debatieron sobre las políticas públicas en el país y la prueba que las autoridades afrontan con la contingencia de salud pública.

Tuirán, coordinador académico de la Maestría en Ciencias Políticas, definió las políticas públicas como respuestas a las demandas de la sociedad hacia el Gobierno, es decir, un paquete normativo que usualmente las autoridades crean para que sean cumplidas por la sociedad, siendo además un proceso global que involucra la toma de decisiones y acciones por parte de las autoridades hacia la ciudadanía.

De acuerdo con el docente, este proceso de políticas públicas se enmarca en tres fases: predecisional, decisional y posdecisional, que determinan los elementos a seguir para la toma de medidas. Se debe identificar una situación que se considere problemática en donde en ocasiones suele participar la sociedad, para así poder atender y darle solución buscando una mejoría a ese hecho puntual. Para ello, se busca metas y objetivos específicos para hacerle seguimiento a tiempo.

“A medida que se caracterizan estas líneas de base para su mejora, se construyen esas respuestas de soluciones rápidas, sin embargo es necesario tener evidencias frente a los problemas, ya que por falta de recursos económicos, técnicos y humanos en algunas administraciones locales no se puede tomar decisiones prontamente”, comentó Tuirán.

Con la actual crisis de la COVID-19, Trejos sostuvo que se pone a prueba la capacidad de repuesta de los administradores, ya que cada día toca tomar decisiones de manera rápida y con informaciones que a veces no son exactas, y que en la fase predecisional lo que se ha implantado son respuestas con improvisación frente a los elementos que poco a poco han sido identificados en algunos municipios o departamentos, porque cada uno es diferente.

Sin embargo, “el aprendizaje está en coordinar más diálogos entre los mandatarios locales y los nacionales para no quedarse en el error”, porque por eso el confinamiento ha sido más estricto ahora que al principio mientras cada día aumenta la presión sobre el sistema de salud.

Para los docentes, los problemas estructurales frente a la economía en estos momentos tienen factores de riesgo.  Por ejemplo, hay un sector amplio de informalidad, conformado por pobres y vulnerables, que está en peligro.

“Al paralizar la actividad económica sus ingresos se han visto afectados dos tercios, pues dependen mayormente de la informalidad (sector pobre) y el 57 % del sector vulnerable depende de la misma. Al suspender estas actividades, este sector queda flotando, sin ingresos y es aquí donde vienen las respuestas rápidas de los mandatarios locales, el alivio al pago por servicios públicos y, por otro lado, la entrega de paquetes alimenticios. Ya no hay ingresos y hay que atender una necesidad primordial como son los alimentos”, recalcó Tuirán.

Finalmente, recordó un problema de la política pública en Barranquilla y es la falta de disciplina colectiva, pues hay un porcentaje de la ciudadanía que es desobediente con el confinamiento. Por eso la ocupación del sistema de salud sanitario ha aumentado y las medidas son más estrictas.  

“En este proceso de construcción de las políticas públicas en un territorio, se debe tener en cuenta que hay diferentes actores en la identificación de problemas, en la construcción de soluciones y en la toma de decisiones”, concluyó Ángel Tuirán.

Por Valentina Sánchez Herrera