Maestría en Derecho recibe la acreditación de alta calidad

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María Lourdes Ramírez, coordinadora de la maestría en Derecho.

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18 dic 2017

El pasado 10 de noviembre el Ministerio de Educación Nacional otorgó por seis años la acreditación de alta calidad a la maestría en Derecho de Uninorte, primera de su tipo que obtiene este mérito en la región Caribe. Desde su inicio de actividades en 2007, más de un centenar de estudiantes se han graduado de las 11 cohortes de esta maestría, que abarca el derecho desde diversas líneas de investigación.

De acuerdo con María Lourdes Ramírez, coordinadora del programa, esta acreditación fue la culminación de un proceso de 18 meses que inició en agosto de 2015 y se consolidó con la visita de los pares evaluadores del Consejo Nacional de Acreditación (CNA) en marzo de 2017.

Entre los factores que evaluó el CNA estuvo la pertinencia del plan de estudios, el tipo y la forma  de desarrollar investigaciones, el cuerpo profesoral, la percepción positiva del posgrado por sus estudiantes y egresados, y el impacto de los egresados en la comunidad. “Son un total de diez ejes, pero todos se articulan en torno a esos factores”, explicó Ramírez.

Para la coordinadora la acreditación es fruto de “un trabajo bastante serio y responsable de todo el equipo, respaldado por las directivas de la división académica y de la universidad”. Indicó también cómo los pares evaluadores resaltaron fortalezas del posgrado, tales como la calidad de sus procesos y el uso de tutorías como herramienta metodológica que permite el acompañamiento continuo del estudiante por el profesor, en un proceso personalizado.

“Un elemento importante para que exista un número alto de egresados son las tutorías. Son un elemento central del proceso de aprendizaje de los estudiantes y permiten que los estudiantes logren con éxito culminar sus estudios en el tiempo establecido”, expresó.

El CNA también destacó, según Ramírez, el plan de estudios “sólido y coherente” de la maestría “que responde a las necesidades del derecho, que se está revisando permanentemente y está impartida por una planta de profesionales consolidada”. En este sentido, la académica subrayó el esfuerzo de los profesores por continuamente revaluar las temáticas que se ofrecen en determinados cursos, para tener una oferta “lo más sólida, coherente y pertinente a la comunidad”.

“Estas situaciones son consecuencias de políticas académicas claras y administrativas, y todas estas fortalezas se ven evidenciadas en la percepción altamente positiva de estudiantes y egresados, y esa es una gran satisfacción para nosotros”, manifestó Ramírez.

Los egresados de la maestría principalmente trabajan en universidades de la región como multiplicadores del que hacer jurídico, otros ejercen como servidores en oficinas públicas y un número importante lo hace como jueces de la República. “A ellos debo agradecerles porque esto no habría sido posible sin el apoyo e intervenciones de los egresados y estudiantes, que valoraron en un grado altísimo la maestría tanto en encuestas como en la visita de pares. Eso nos permite corroborar que estamos haciendo las cosas bien”, aseguró la coordinadora.

Silvia Gloria, decana de la división de Derecho, Ciencia Política y Relaciones Internacionales considera la acreditación como un gran reconocimiento, en la medida que “no somos solamente nosotros diciendo que somos buenos, sino Mineducación. Y cuando un tercero dice que tu programa es de alta calidad, significa que estás muy por encima de los estándares. Eso a mí me parece un honor”, expresó.

Gloria añade que tener alta calidad es una condición que no termina y plantea una serie de nuevos retos. “El hecho de que nos hayan dado seis años hace que tengamos el compromiso de revisar a lo largo de ese tiempo cómo mejoramos, porque cuando eres bueno y hace las cosas bien es difícil pensar en cómo mejorar. Entonces, el reto es superior”.

Por Andrés Martínez Zalamea

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