Niños y población de la tercera edad, los más afectados por la contaminación del aire

enfermedad-respiratoria.jpeg
Las enfermedades respiratorias causadas por contaminantes en el aire afectan más fuertemente a los niños entre los 0 y los 9 años

Por:

27 jul 2018

“Nuestro estudio permite ratificar lo que la literatura ha comprobado previamente, el impacto que tiene la contaminación del aire sobre enfermedades respiratorias; pero adiciona algo nuevo: el impacto sobre enfermedades cardiovasculares”, contó Julián Fernández Niño, profesor del Departamento de Salud Pública.  

El docente hizo parte de un grupo de investigación que usó durante cuatro años (2011 a 2014) la información diaria de la red de monitoreo de la calidad del aire en Bogotá, Cali, Medellín y Bucaramanga, y evaluó su asociación con el número de visitas médicas por urgencias que hubo por enfermedades respiratorias, cardiovasculares y cerebrovasculares, y durante los siguientes días luego de los cambios en los contaminantes del aire.

El estudio, en el que participó Fernández Niño como encargado del análisis y la metodología del proyecto, fue liderado por Laura Andrea Rodríguez-Villamizar, de la Universidad Industrial de Santander, quien estuvo apoyada por Néstor Yezid Rojas-Roa, de la Universidad Nacional, Luis Camilo Blanco-Becerra, de la Universidad Santo Tomás, y Víctor Mauricio Herrera-Galindo de la Universidad Autónoma de Bucaramanga.

De esta forma, el equipo de investigación halló que el dióxido de nitrógeno y el material particulado de 2,5 y 10 micras son los más nocivos. El primero es un producto de los procesos de combustión a altas temperaturas como los que se encuentran en carros y plantas eléctricas. Por otra parte, el material particulado es una serie de cuerpos sólidos y líquidos diminutos que se encuentran en el aire y se agrupan en las dos medidas mencionadas. “Las de 2.5 micras son más importantes porque se absorben más rápido en el torrente sanguíneo y pueden afectar diversos órganos”, explicó el profesor Fernández.

Los resultados principales fueron: por cada incremento de 6 microgramos por metro cúbico de dióxido de nitrógeno en el aire, se da un incremento porcentual de 10.59% en las consultas de las enfermedades respiratorias de niños de 5 a 9 años en las ciudades estudiadas. Las alzas en este contaminante también causan un aumento de 6.12% y 6.17% las consultas en mayores de 60 años por razones cardio y cerebro vasculares respectivamente.

Asimismo, los incrementos de 10 microgramos por metro cúbico de material particulado de 10 micras reflejan un alza de 8.32% en consultas por problemas respiratorios en niños. Además, 5.06% y 7.92% fueron las alzas en consultas de adultos mayores en enfermedades vasculares. El incremento de material particulado de 2.5 micras aumentó en 8.23% las consultas para niños y en los adultos, 5.61% y 7.17%.

El estudio tuvo en cuenta el concepto de rezago, pues los efectos de los contaminantes no se ven reflejados de manera inmediata. Además, elaboraron un modelo condicional que, por medio de comparaciones de los días de un mismo mes, elimina el efecto de estacionalidad y permite observar las consecuencias de los contaminantes en el aire. El artículo científico ya fue aceptado en la revista International Journal of Environmental Research and Public Health y se publicará en los próximos días.

Barranquilla no estuvo en el estudio, puesto que no había un análisis de la calidad del aire en la ciudad, como el que hoy se adelanta. “Necesitamos, por lo menos, un año completo de datos para poder verificar pues es muy probable que estos efectos también estén presentes en la ciudad”, aseveró el profesor.

A futuro, el docente continuará trabajando con el equipo de investigación en temas como “el efecto de la mezcla de varios gases, la interacción entre ciertas vulnerabilidades individuales, como en ciertos pacientes con ciertas enfermedades. El efecto de contaminación del aire va a ser mayor que en otros y datos de más pequeña área por largos periodos”, detalló Fernández.

Por Leonardo Carvajalino

Más noticias