Primera exposición de los inuit en América llega a Mapuka

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Francesc Bailón y asistentes durante la inauguración de la exhibición.

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07 may 2018

Los inuit son la población indígena que más disfruta de extensión territorial en el planeta (8200 km). Es la primera en la historia en eliminar el analfabetismo y actualmente son considerados “los grandes cazadores del norte de América”. La universidad, en el marco de los cinco años del museo Mapuka, presentó el 3 de mayo la exhibición “Nuna, la tierra de los Inuit”.

La muestra etnográfica inaugurada por Francesc Bailón, antropólogo catalán, es la primera que se realiza en toda América y estará disponible en el museo hasta agosto. Junto con la exhibición, habrá otras actividades a través de las cuales se busca establecer un contacto entre esta historia del Ártico y el caribe colombiano.

De acuerdo con Bailón, el objetivo de la muestra es que el público conozca la realidad cultural e historia de los inuit contada por ellos mismos. “Lastimosamente este grupo se conoce por su nombre, pero no por quienes son ellos y su papel en el mundo”, afirmó. Cada pieza es considerada una “obra de arte” que hace parte de la cotidianidad de la comunidad, ya que no se comercializan y guardan su valor en el uso que se les da.

Los inuit son una etnia que habita las zonas de Alaska, Siberia, Groenlandia y Canadá. Sus orígenes se remontan a 4500 años atrás y estaban divididos en 21 grupos diferentes, cada uno con sus costumbres y tradiciones, aunque los que se conocen hoy tienen su última ascendencia de hace 1000 años. Actualmente su lengua es la única en el mundo que se escribe de tres maneras distintas. En Groenlandia utilizan el alfabeto romano; en Alaska y Siberia, el cirílico, y en Canadá, el silábico.

Uno de los elementos que ha condicionado la evolución de este pueblo tiene que ver con las temperaturas de las zonas en las que habitan —las cuales oscilan entre los -50 y -60 grados bajo cero—, ubicadas dentro del círculo polar ártico, cuya latitud genera el fenómeno conocido como permafrost. Lo que significa que no existe vegetación alguna y que además no ven el sol durante cuatro meses en el año.

“Si hay algo que resaltar sobre los inuit es su adaptabilidad al medio. Estas personas viven para la madre naturaleza y no van en contra de ella, al mismo tiempo que se ajustan a los servicios tecnológicos que han emergido con el pasar de los años para una mejor calidad de vida, de no ser así, hace tiempo habrían desaparecido”, señaló Bailón.

Los inuit son de las pocas comunidades indígenas que tienen sus propios sistemas de gobierno y tierras independientes como Nunavik y Nunavut. Además, son los primeros en la historia en crear su propia organización no gubernamental en 1977: el Consejo del Círculo Polar Ártico Inuit, para luchar en contra de la colonización. Lo anterior los convierte en un referente político, económico y social para otros.

“Este grupo indígena es uno los más inteligentes del mundo, su creatividad, ingenio y manera de honrar los pocos recursos naturales que existen en el Ártico, los convierte hoy en la civilización cazadora más avanzada del planeta. Ellos son los creadores de lo que hoy conocemos como gafas de sol”, destacó el catalán.

Respecto a sus creencias, esta comunidad ha adoptado tres religiones que son el animismo, cristianismo y el chamanismo, esta última convirtiéndose en la más popular. Entre algunos de los rituales significativos que han tenido, se encuentra el duelo de canciones. "Un espacio en el que se reunían los hombres para dar solución a las problemáticas internas del grupo a través de canciones y poesía”, contó Bailón.

Para el también docente existe algo que la mayoría de la humanidad ignora respecto a este grupo. Se trata de la relación intrínseca que hay entre ellos y nosotros. “De la supervivencia de los inuit depende la nuestra. Esta comunidad es esencial en el Ártico. Son ellos quienes contribuyen al funcionamiento del ecosistema a través de sus actividades como la caza de ballenas, osos polares, focas, entre otros”, manifestó.

El antropólogo, que lleva más de 20 años estudiando a la población y ya hace parte de esta familia, aprovechó el espacio para explicar a estudiantes, funcionarios y docentes que inuit (inuktitut) en castellano significa ser humano y se hacen llamar así con el fin de hacer un llamado al mundo. “El termino esquimal es despectivo. A ellos no les gusta que les llamen así y es importante que lo sepamos y empecemos a respetarlos”, concluyó.  

Por María Celeste Lozano 

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