¿Qué necesitan los líderes para sacar adelante a sus empresas en tiempos de pandemia?

La ansiedad, la crisis económica y la incertidumbre a futuro presentan grandes retos para los empresarios a nivel mundial. En un conversatorio organizado por el CEC y la Cámara de Comercio de Barranquilla, varios expertos definieron las características que necesitan los líderes para afrontar lo que viene.

summit-empresarial.jpg
Elisama Dugarte, directora del CEC; Manuel Fernández, presidente de la Cámara de Comercio de Barranquilla; el rector Adolfo Meisel y la conferencista Blanya Correal.

Por:

15 jul 2020

Como una forma de seguir fomentando el desarrollo del tejido empresarial de la región, golpeado por la pandemia, la Cámara de Comercio de Barranquilla y el Centro de Educación Continuada (CEC) de Uninorte se aliaron para organizar una cumbre alrededor de temas de interés, que se llevó a cabo el 14 de julio. 

La Summit Empresarial: Networking para el desarrollo de las organizaciones contó con la participación de Margarita Pasos, representante y entrenadora exclusiva de la firma Brian Tracy; Blanya Correal, experta en recursos humanos; y Aída Lucía Vélez Vengoechea, gerente nacional de Gestión Humana de Olímpica. 

El liderazgo es fundamental durante esta época de incertidumbre, para la que se estima un golpe económico mundial de la magnitud de la Gran Depresión. Precisamente, haciendo referencia a este evento histórico, el rector Meisel sacó enseñanzas de cómo las decisiones de dos líderes que surgieron en esa época —Franklin D. Roosevelt y Adolf Hitler— pueden agudizar o sanar la crisis que se vive. 

Durante la crisis, las malas ideas prosperan, señaló el rector, y en ese sentido se debe ser cuidadoso del tipo de liderazgos que se ejercen. Añadió que se debe tener siempre presente, como eje central, la democracia y el relacionamiento con otros como la forma de liderar. “Eventos como este son los que necesitamos, que dan la posibilidad a mucha gente a participar”, finalizó.

Pasos explicó que el liderazgo es algo que no se otorga, no se regala, no se compra, no se impone y lo definió como la influencia que ejerce una persona sobre otras. Por esto, en la coyuntura que vivimos, es clave tener un efecto positivo que germine, desde el punto de vista organizacional, desde arriba. 

En ese sentido, recomendó como un primer paso que el líder se enfoque en sí mismo y que logre el mando de sus emociones. “Cuando yo estoy en control de mis emociones, pensamientos y de mi mente, controlo mis acciones y, por ende, mis resultados”, expresó la experta. Por ello, se debe evitar tomar decisiones apresuradas, bajo los efectos que produce el estrés y el miedo. 

Añadió que es clave hacer una dieta mental para evitar el estrés; no estar informado las 24 horas del día con las noticias sobre la covid-19, e intentar ocupar ese tiempo en actividades que generen un sentimiento de satisfacción o paz. La conferencista recomendó cultivar la comunicación abierta y transparente con todos los miembros del equipo de trabajo. Esta debe ser frecuente, pues el silencio causa ansiedad en los colaboradores y en lo posible explicar el porqué de las decisiones que se toman. 

Vélez destacó la necesidad de que el liderazgo no sea vertical sino que se fomente como un ambiente de participación en el que cada quien asuma sus responsabilidades como parte del grupo humano que conforma una empresa. Si bien la alta gerencia es la responsable del proceso y de trazar ese objetivo que se tiene, el camino para llegar a la meta se debe construir entre todos, teniendo en cuenta las necesidades, intereses y temores de cada uno de los empleados. 

Correal citó a Winston Churchill —“Nunca dejes que una crisis se desperdicie”— para llamar la atención en que dentro de todas las situaciones negativas que acarrea la pandemia, también hay oportunidades de negocio para aprovecharse. Por ejemplo, en América Latina ha subido en 387 % la penetración digital, y el e-commerce crece a tasas del 150 %, dos resultados que se esperaban en un mediano plazo pero que se han adelantado como efecto de la pandemia. Así mismo, el cierre y restricciones de mercados internacionales presenta oportunidades de comercio a nivel nacional y regional. 

La experta mexicana argumentó que aun cuando se ha visto una reacción acelerada de los negocios para adaptarse, es clave que estos cambios, de mostrarse efectivos, perduren en el tiempo y que hagan parte de una nueva cultura de la empresa. También anotó que el foco debe estar tanto en el resultado como en el equipo humano que lo logra. 

De acuerdo con las estimaciones de diferentes entes internacionales, Colombia podría retroceder en lo que se había conseguido en materia de la reducción de pobreza. En el caso del Atlántico, el 97 % del tejido empresarial son micro y pequeñas empresas que generan el 41 % del empleo. Manuel Fernández de la Rosa, presidente de la Cámara de Comercio de Barranquilla, señaló que cerca del 86 % de las empresas se han renovado para enfrentar la crisis, lo que demuestra un dinamismo que sigue en pie, y la labor es seguir trabajando para impulsarlo. 

Por Leonardo Carvajalino

Más noticias