Reacción y adaptación, constantes de las empresas en tiempos de pandemia

La llegada de la pandemia ha traído consigo la necesidad de adaptar los hábitos y prácticas empresariales a un entorno distinto, en el que las herramientas digitales juegan un rol fundamental. Para hablar de esta temática, Pacto Global Colombia, la iniciativa que promueve el compromiso del sector privado, sector público y sociedad civil con el cumplimiento de los objetivos de desarrollo sostenible de la ONU, organizó el 5 de agosto un webinar con representantes de varios sectores de la economía. 

El rector de Uninorte, Adolfo Meisel, quien estuvo entre los invitados al panel, señaló que las crisis también son tiempo de oportunidades. Una de las características que tienen este tipo de eventos es la vuelta a las universidades de estudiantes que habían desertado para ingresar al mundo laboral. Debido a una baja en la demanda de puestos de trabajo y la mayor facilidad que permite la virtualidad, se ha visto un alza en estudiantes matriculados y específicamente en aquellos que han retornado para terminar sus estudios. 

El contraalmirante León Espinosa, director de la Escuela Naval de Suboficiales ARC Barranquilla, comentó que la modalidad de clases virtuales ha sido efectiva, al tiempo que ha sido exigente tanto para docentes como estudiantes. “Es cuestión de reacción y hemos logrado reaccionar. Hemos vivido un proceso de aprendizaje duro y rápido y pudimos ser más flexibles de lo que hubiéramos pensado”, anotó, haciendo referencia al alto componente práctico que tienen la pedagogía en la Armada. 

En términos de retos, añadió Meisel, una de las situaciones a resolver en este contexto de educación remota y distanciamiento social es el hecho de que el conocimiento que adquieren los estudiantes proviene tanto de las clases como de conversaciones y espacios informales de transferencia de información que se dan en el campus. En este sentido, marcó el rector, la adaptación a la virtualidad también debe estar pensada para ofrecer espacios que promuevan el diálogo e interacción entre estudiantes. 

Desde Promigas, Lucía Ruiz, gerente de sostenibilidad, manifestó que se ha hecho un esfuerzo concertado por ofrecer las condiciones laborales para que sus empleados gocen de un trabajo digno, en línea con el octavo objetivo de desarrollo que plantea la ONU. Afirmó que tanto contratistas como colaboradores han conservado su trabajo y que han reflexionado en torno a promulgar un ambiente en el que haya una división entre la vida personal y laboral; uno de los grandes retos a los que se enfrentan las empresas en esta transición. 

El Zoológico de Barranquilla, como todas las empresas que dependen de la entrada de personas, ha tenido que replantear completamente su modelo, contó Farah Ajami. En primera instancia, encontraron en campañas de gestión de fondos una solución para la manutención de los 800 animales que se encuentran en el recinto. 

Sin embargo, al ver la duración de la cuarentena, se han visto en la necesidad de ser más proactivos y de esta forma han desarrollado una nueva estrategia ayudados por las herramientas digitales. Consiste en llevar el ‘zoológico a la casa’, es decir, experiencias pagas personalizadas de acuerdo con3 pedidos que hacen los usuarios en redes sociales, ya sea de tipo recreativo o pedagógico. 

La situación opuesta se ha visto en Procaps. Gonzalo Nieto, director ejecutivo del Sistema de Innovación Corporativo, contó que la empresa, a diferencia de la tendencia económica, ha visto un alza en la demanda de sus productos, lo que ha significado que desde el primer día se han concentrado en la planeación para continuar las operaciones de manera segura. 

Una de las claves para lograr esta adaptación rápida, comentó, es que la innovación es uno de los principios que rige Procaps, pues siempre están buscando formas de hacer las cosas para seguir siendo vigente, válido y preferidos por el consumidor. “La innovación está en la médula, estamos acostumbrados a encontrar en los retos formas de avanzar”, añadió. 

Los cinco representantes de importantes instituciones y empresas del Caribe concordaron en la noción de que esta pandemia ha dejado al descubierto una problemática importante: la región necesita una mejor focalización de los recursos. Esto no depende solo de los gobernantes sino de todos los actores que componen este ecosistema, que trabajen colaborativamente para mejorar la calidad de vida de cada uno de las personas que habitan esta región. 

Por Leonardo Carvajalino