Reflexión sobre el Caribe que narran sus escritores

ForoCaribedeescritores.jpg
Los conferencistas Alberto Abello, Adriana Rosa, Mercedes Ortega y Orlando Araújo.

Por:

25 sep 2018

Analizar la producción literaria que se ha gestado en la región, reflexionando sobre las obras de sus escritores más destacados, fue el objetivo del primer “Foro Caribe de escritores: río de letras, mar de libros”, organizado el 21 de septiembre por la Editorial de la Universidad del Norte, en el marco de la primera edición de la Feria del Libro de Barranquilla (Libraq).

Gabriel García Márquez, Marvel Moreno, Germán Espinosa y Hazel Robinson plasmaron a través de las letras su visión particular del Caribe, destacando su cultura, su lenguaje y la idiosincrasia de sus habitantes. Es por eso que los conferencistas invitados: Alberto Abello Vives, director de la Red de Bibliotecas del Banco de la República; Orlando Araújo Fontalvo, doctor en literatura; Mercedes Ortega González-Rubio, doctora en Estudios Iberoamericanos y Adriana Rosas, doctora en teoría de la literatura y literatura comparada, argumentaron sobre la influencia de sus obras en el Centro de Eventos Puerta de Oro.

Con la conferencia De qué Caribe habla García Márquez, Abello Vives, economista y uno de los principales expertos y promotores de la cultura del Caribe colombiano, dio inicio al evento. “Gabriel García Márquez reconoce el Caribe como una región multicultural, de múltiples raíces culturales, pero en la que aquellas provenientes de la costa occidental africana, con el comercio triangular colonial y la esclavitud de millones de seres, la marcaron de manera particular”, afirmó.

¿De qué Caribe habla Gabriel García Márquez? Para Abello Vives la condición de espacio abierto, cruce de caminos, lugar para el encuentro de culturas y territorio en movimiento que marca el Caribe es posible encontrarla en distintas escalas, si estudiamos la obra de García Márquez.

Orlando Araújo Fontalvo, profesor de la Universidad del Norte, ofreció la conferencia Cien años de soledad y La tejedora de coronas, dos formas de entender el Caribe, con la que analizó la visión del Caribe desde la que se construyen narrativamente estas dos novelas, “las dos más deslumbrantes expresiones de la historia intelectual colombiana”.

“Es incontestable la relevancia que tiene el entorno social para la configuración de la concepción del mundo de un escritor (…) La una, Cien años de soledad, mítica y transculturadora, concentra en un mismo punto del espacio y del tiempo un siglo de acontecimientos cotidianos. La otra, La tejedora de coronas, erudita y transatlántica, viaja por el mundo entre luces y sombras”, expresó Araújo.

De acuerdo con el docente, la gente del Caribe ha desarrollado dos virtudes: el sentido del humor y el discurso anecdótico, las cuales al juntarse funcionan como un eficaz instrumento de interpretación y comunicación de la realidad.

Minutos después la ponencia Todas deberíamos ser amazonas, de la profesora Mercedes Ortega, expuso la manera en la que la escritora barranquillera Marvel Moreno retrata en su obra a “mujeres fuertes que no se adaptan a las reglas que se les imponen”.

“Marvel Moreno es una de las mujeres más valientes que dio la región Caribe, se atrevió a desafiar las normas de una sociedad que la quería bella y tonta, y se convirtió en una escritora que denuncia la miseria afectiva, espiritual e intelectual de nuestra cultura”, enfatizó Ortega.

El foro finalizó con la conferencia Hazel Robinson en el mar de lo afrocaribe, a cargo de Adriana Rosas, también profesora de la Universidad del Norte. Durante su presentación analizó la obra de la escritora sanandresana desde la perspectiva de sus relaciones con el mar, lo que conlleva la creolidad, el poscolonialismo y la mezcla de culturas.

“Hazel, relacionándola con la charla anterior, para mí es una amazona. Una mujer que por un tiempo de su vida trabajó, fue independiente, se casó, se dedicó a los hijos, pero luego está publicando y escribiendo. A través de su escritura pretende establecer un puente hacia el Caribe insular colombiano, bastante diferente al Caribe nuestro”, puntualizó la docente.

Por José Luis Rodríguez R.

Más noticias