Un día para conmemorar la lucha constante por la equidad de género

El Día de la Mujer, más que una celebración, es una fecha para conmemorar las luchas que se libraron, concientizar a la gente en las que faltan en el camino por la equidad de género en nuestro planeta. Este año en Uninorte queremos resaltar el rol de la mujer en áreas donde comúnmente encontramos más hombres. Personas que se destacan porque dan todo de sí para hacerlo cada día mejor y demostrar que con pasión y las competencias adecuadas, los logros se alcanzan, sin importar el género. 

Laura Cardona Tejada, Jefe de Bienestar Organizacional, comentó que en la Universidad del Norte, hay una distribución equitativa en cuanto a porcentaje de planta de personal masculino y femenino. No obstante, en campos como la ciencia, la construcción y la seguridad todavía hay un desbalance. “Queremos mostrar a estas mujeres que con iniciativa, liderazgo, alegría, y sabiduría están posicionando el rol de la mujer”, afirmó. 

Cada vez que hay una nueva construcción en el campus, Maria Alejandra Patiño y Jennifer Peluffo entran a la acción. La primera, desde la arquitectura, se encarga desde la fase previa de diseñar y analizar cómo se realizarán las estructuras, mientras que la segunda, ingeniera civil, se asegura que todos los elementos en la fase de ejecución estén en orden y funcionen. 

“Las mujeres somos especiales, al igual que los hombres, y pienso que depende de nosotras mismas querernos, amarnos y respetarnos como mujeres. Eso va a hacer la diferencia”, dijo Peluffo. “A donde llegues, tienes que darte el valor y aceptar el mismo trato, sin peros”, complementó Patiño. 

Ambas estuvieron de acuerdo que sin importar género, mujeres y hombres tenemos las mismas capacidades y día a día, en un ambiente que les ha permitido usar sus habilidades, demuestran la excelencia de la que es capaz el ser humano. 

Kimberly Sierra es auxiliar de seguridad en la Biblioteca Karl C. Parrish. La mujer se destaca en un ambiente que se piensa es exclusivo para los hombres. “Decían que las mujeres eramos el sexo débil, pero en el siglo XXI, nos hemos dado cuenta que somos más fuertes que los hombres”, afirmó. 

Cada día, Sierra, además de hacer parte del equipo de seguridad física, apoya en diferentes aspectos la logística de la biblioteca. “Y hacemos las cosas exactamente igual”, remarcó. 

En la academia hay representantes como Lucy García, docente del departamento de Ingeniería de Sistemas y una de las pioneras de esta lucha en Uninorte. Señaló que es una necesidad trabajar en las generaciones más jóvenes para mostrar la ciencia como una opción atractiva de vida. 

Andrea Monroy, docente del departamento de Química y Biología, anotó que hay temores y angustias que son más marcados para las mujeres dentro de áreas de la ciencia como el trabajo de campo en zonas remotas. “Hay que dejar el miedo, ser más arriesgadas, y atreverse”, aconsejó. 

Por su parte, Natalia Hernández, del Departamento de Matemáticas, dijo que cada día en el mundo se necesitan más personas que piensen y dediquen su vida a suplir las necesidades que existen. La inclusión es una obligación pues en este clima que se ha vivido durante siglos de separar a la mitad de la población simplemente por su género, se ha perdido un gran potencial humano. 

Ana María Pereira, Jenny Torrents y Elena Hoyos son ingenieras de proyectos en la Dirección de Tecnología Informática y Comunicaciones. Su labor consta de implementar servicios de innovación tecnológica en las diferentes áreas de la universidad, como diferentes softwares que se utilizan en la academia y lo administrativo, para crear soluciones para la comunidad universitaria.

“En la universidad no se ve una diferencia en el entorno. Se brinda oportunidades para cualquier persona dependiendo de los conocimientos, experiencia y capacidad que tenga”, manifestó Hoyos. Torrents añadió que se trata de tener la disposición de enfrentar los retos que se presenten, “y para adelante”, cerró Pereira. 

Por Leonardo Carvajalino