Una historia de éxito que inició en Uninorte

Luego de trabajar por quince años como empleado, Rodrigo Otoya Domínguez tenía un propósito en mente: independizarse para crear su propio negocio. Dejó su cargo de directivo en una organización de prestigio y se arriesgó a reescribir su historia; hoy es propietario de un grupo del que hacen parte alrededor de 12 organizaciones.

Egresado del pregrado de Administración de Empresas en 1977, Otoya es el presidente de la junta directiva de Giros y Finanzas, compañía que fundó en 1996 y que desde ese entonces es agente de Western Union en Colombia.

En el marco del Seminario Presidentes de Empresas el pasado cinco de mayo, el egresado se dirigió a los estudiantes del MBA para compartir con ellos su historia de vida y éxito. Así mismo, hizo un paralelo entre dos de sus compañías: Giros y Finanzas y Cementos San Marcos, dedicada a la fabricación y comercialización de este material.

Esta última, ubicada en Yumbo, Valle del Cauca, tuvo una capacidad de producción de 550. 000 toneladas de cemento en el 2016, a tan solo cuatro años desde que inició operaciones.

Para Otoya, el país está atravesando por un buen momento para emprender, debido en parte a la firma del Acuerdo de Paz. “Evidentemente ha habido épocas difíciles y complejas para todos, pero ahora Colombia es un país que le da mucha seguridad al empresario”, dijo.

Sobre los aspectos que se deben tener en cuenta para tener éxito profesional, el empresario resaltó que la seguridad y confianza son esenciales. “La seguridad en sí mismo es la que origina la capacidad de asumir retos. Hay que ser visionario, ser capaz de soñar, de tal manera que uno puede realizar esos sueños”, expresó.

Así mismo, enfatizó en la importancia que tiene que las personas financiera y laboralmente exitosas contribuyan a la comunidad y generen aportes que puedan construir una mejor sociedad.

Bajo este propósito Otoya fundó junto con su núcleo familiar la Fundación Jera que tiene como finalidad mejorar las calidad de vida de jóvenes con discapacidad y adolescentes en condiciones vulnerables.

Sobre su regreso a Uninorte, el empresario destacó el crecimiento que ha tenido la universidad tanto en el ámbito académico, como en la infraestructura. “Yo me gradué con siete compañeros más y solo existían tres o cuatro bloques académicos. Parte de la formación que me llevó a tener éxito profesional me la dieron aquí. Me siento orgulloso de ser egresado de esta universidad”, manifestó.

Por Oriana Lewis