Vencer la covid-19, un proceso físico y psicológico

Jorge Quintero, líder del programa de rehabilitación física y pulmonar del Hospital Universidad del Norte, explicó que los recuperados de covid-19 pueden presentar secuelas como falta de respiración y estrés postraumático, y por ello se debe abordar la rehabilitación de una manera holística.

rehabilitacion.jpg
Interior de la Sala de Rehabilitación del Hospital Universidad del Norte

Por:

08 sep 2020

Uno de los aspectos del coronavirus que lo ha hecho tan perjudicial para la humanidad es la incertidumbre que  trae consigo. Si bien hay comorbilidades que hacen que haya una mayor tendencia a complicaciones, cualquiera es susceptible de una infección severa. Esto genera riesgos no solo desde el punto de vista físico, sino también mental para la recuperación de los pacientes. 

Según expertos como Jorge Quintero, neumólogo internista y líder del programa de rehabilitación física y pulmonar del Hospital Universidad del Norte, es clave por ello pensar la rehabilitación desde un punto de vista holístico. El experto, que recientemente estuvo invitado al espacio 30 minutos 10 preguntas del canal de YouTube de Uninorte Académico, señaló que la mejoría total es posible en la gran mayoría de pacientes. 

La duración de la infección varía de acuerdo con el cuadro que presenta cada persona. Existe un primer grupo, los asintomáticos, quienes no van a presentar secuelas y que diez días después de recibir el resultado positivo de la prueba, no serán transmisores del virus y estarán virtualmente recuperados. 

El segundo grupo, las personas que presentaron síntomas leves, también deben esperar diez días después de haber recibido el resultado de la prueba, pero además presentando durante tres días seguidos síntomas de mejoría para considerar su inicio en el proceso de recuperación. Por su parte, las personas que vivieron una infección severa que requirió de hospitalización se consideran un riesgo de contagio para otros durante 14 días. 

Tras este tiempo, no significa que el paciente estará completamente saludable. Quienes padecieron de covid-19, aun cuando hayan estado perfectamente sanos previamente, pueden quedar con secuelas funcionales. Por ejemplo, una de las reportadas con frecuencia es la dificultad para respirar. 

Esta secuela puede ser causada por un daño en el intersticio, que es un conjunto de fibras y células que sostienen el pulmón, lo que significa la dificultad en el paso del oxígeno a la sangre. También puede tener su origen en una enfermedad vascular pulmonar, que le ocurre a un pequeño grupo de la población, cuya dificultad para respirar tiene su origen en la presencia de coágulos dentro de la vasculatura del pulmón. 

Por ello, el primer paso, de acuerdo con el experto, es una adecuada evaluación al terminar la infección de parte de un médico general —o internista en los casos más complejos—. Pacientes hospitalizados por mucho tiempo han registrado pérdida de masa muscular, de peso y problemas de nutrición.


 

Aclaró que existe la posibilidad de infectarse por segunda vez de covid-19, pues ya se han documentado por lo menos dos cepas. No obstante, la segunda infección, en la gran mayoría de pacientes, es asintomática o con síntomas leves. 

Las secuelas también se están viendo de manera recurrente en el estado emocional de los que tienen o tuvieron la enfermedad. Debido a la incertidumbre por la que pasan ante el desenlace de la enfermedad y la percepción de cercanía ante la muerte, muchos infectados registran estrés postraumático. 

Teniendo todos los anteriores elementos en cuenta, desde el Hospital de la Universidad del Norte se desarrolló un programa con un enfoque holístico que busca valorar al paciente desde distintas perspectivas para mejorar la tolerancia al ejercicio y la capacidad pulmonar, contribuyendo a que se retomen sus actividades normales y su productividad.

Se busca una rehabilitación personalizada, ajustada a las condiciones y necesidades del paciente, con los mejores resultados posibles. Para ello se integran profesionales de distintas disciplinas como neumología, medicina interna, medicina familiar, terapia física y psicología.

En Colombia, más de 500 000 personas se han recuperado tras haber padecido de covid-19, según cifras del Instituto Nacional de Salud. Quintero señaló que aun cuando esta cifra es importante, todavía hay millones de colombianos que son susceptibles de padecer esta enfermedad y no es el momento de bajar la guardia, sino por el contrario, intensificar las medidas de autocuidado. 

“Esto es una maratón, no es una carrera de 100 metros. No nos podemos cansar, y mucho menos ahora cuando estamos saliendo a la calle”, finalizó. 

Por Leonardo Carvajalino

Más noticias