Investigadores colombianos y alemanes trabajan para preservar ecosistemas nacionales

Conocer los principales factores ecológicos, sociales y  geográficos que intervienen y afectan la biodiversidad en la región Caribe y los Andes es el propósito de Colbiodiv, un proyecto de investigación que surgió de la cooperación científica entre la Universidad del Norte, el Jardín Botánico de Bogotá, la Universidad Libre de Berlín y su Jardín Botánico; instituciones que están interesadas en entender y preservar mejor la vasta diversidad vegetal de Colombia.

Desde 2014 empezaron a darse los primeros acercamientos para este proyecto mediante visitas de los investigadores alemanes a los ecosistemas nacionales; partiendo de estas se determinó que en la región Andina se explorarían los páramos y sus bosques, mientras que en el Caribe se enfocarían en el bosque seco tropical, un importante sistema biológico del cual solo queda el 8% en el país.

Por los próximos tres años este proyecto interdisciplinar se desarrollará en el Caribe con la participación de investigadores de la Universidad Libre de Berlín y profesores del departamento de Biología y Química de Uninorte,  que serán apoyados por expertos de otros departamentos como Economía y Arquitectura. Juntos trabajarán en cuatro líneas de investigación que incluyen la identificación de los organismos presentes en este ecosistema, la composición de la vegetación que existe en este bosque, la comprensión del uso que se le ha dado a sus suelos y, finalmente, la relación que se da entre sus pobladores y el entorno natural.

El Morro, en Tubará y la reserva natural El Palomar, en Piojó, Atlántico, han sido elegidas por los científicos de Colbiodiv como zonas representativas del bosque seco tropical en la región. Por ello entre finales de octubre y mediados de noviembre de este año, los investigadores alemanes y los de Uninorte iniciaron salidas de campo, para recolectar muestras de suelo y plantas propias de este ecosistema. Ambas muestras serán posteriormente analizadas por estudiantes doctorales de biología y geografía, que hacen parte de la Universidad Libre de Berlín.

Thomas Borsch, director del Jardín Botánico de Berlín, es uno de los investigadores principales. Explicó que uno de los aportes que Colbiodiv hará para la conservación de la biodiversidad en Colombia, es suministrar información rigurosa para que los gobernantes y las comunidades puedan tomar decisiones acertadas sobre el manejo de sus recursos  naturales.

“Es importante saber qué especies y recursos hay para luego poder entender los factores que inciden en la biodiversidad, y con eso se pueden hacer planes de manejo más eficientes para el beneficio del medio ambiente y poder explicarle mejor a los habitantes de las regiones la influencia que ellos están ejerciendo sobre el territorio, y así desarrollar una mayor conciencia en ellos”, afirmó el botánico.

Borsch mencionó que el Jardín Botánico de Berlín es una institución antigua con más de 300 años de trabajo a favor de la vegetación a nivel mundial. Y aunque cuentan con colecciones representativas del Caribe insular y continental, la institución quiere extender su comprensión de la flora latinoamericana, por lo que estas investigaciones en los ecosistemas colombianos es un primer paso en esa dirección.

Además de los profesores, la Universidad del Norte también ha financiado a un estudiante doctoral para que pueda contribuir con sus investigaciones al proyecto. Marcela Celis, coordinadora nacional de Colbiodiv e investigadora de Uninorte, destacó que el apoyo de la institución también se ha dado a través de la infraestructura del nuevo laboratorio de Química y Biología, en donde los científicos podrán desarrollar mejor su trabajo.

Contó que para el próximo año se planea una segunda visita con los estudiantes doctorales de Alemania, entre en febrero y marzo, para hacer un muestreo de vegetación en diferentes épocas, en las dos zonas escogidas en el Atlántico. Así mismo se pretende que los biólogos e investigadores de Uninorte continúen con las colectas de especies de plantas en dichas zonas, para nutrir el material de estudio del proyecto, y el herbario propio de la Universidad, que está registrado internacionalmente bajo el nombre de UNO. 

“Vamos a seguir colectando ejemplares de plantas porque tener un herbario es fundamental para entender a los especímenes, dónde fueron colectados y dónde están más preservados. También para nuestro herbario UNO es importante que se hagan proyectos como estos porque no solo vamos a incrementar nuestra colección, sino que podemos empezar a ser un referente en la región y fortalecer la línea en ciencias de Uninorte”, manifestó Celis.

Por María Margarita Mendoza.