Así se está enfrentando la industria aeronáutica a los nuevos retos

Wilson Casas, ingeniero mecánico que trabaja en Airbus, estuvo en Mapuka para hablar sobre la implementación de las nuevas tecnologías en la industria y en qué se están concentrado de cara al futuro.

wilson-casas-airbus.jpg
Wilson Casas habló en el museo Mapuka.

Por:

22 mar 2019

Wilson Casas, barranquillero que trabaja en la compañía de aviación Airbus, fue invitado en la mañana del 21 de marzo a dictar una charla en el museo Mapuka en torno a los retos a los que se enfrenta la aviación. El ingeniero mecánico habló sobre cómo se puede aprovechar el paso acelerado de las nuevas tecnologías en una industria que se demora en implementar cambios.

Advirtió que, aun cuando el tráfico aéreo solo produce el 2,7% de las emisiones de CO2, el sector debe seguir la tendencia mundial de utilizar energías limpias. “La meta para 2050 es reducirlas en un 50%”, dijo. Casas aseguró que la primera empresa que pueda producir un avión eléctrico que se ajuste a unos márgenes de costo razonables dominará el mercado y que por esto compañías como Airbus y Boeing se encuentran inviertiendo recursos en esta tecnología.

La limitante a la que se enfrentan actualmente es la capacidad de energía de las baterías en relación a su peso, puesto que un avión puede cargar alrededor de 97 toneladas. El conferencista comentó que se estudian otras posibilidades como los híbridos y células de combustible de hidrógeno.

La necesidad de que la movilidad urbana adquiera una “tercera dimensión” también fue otra de sus reflexiones. Según los pronósticos demográficos, las ciudades seguirán creciendo y en 2030 al menos 43 ciudades tendrán más de 10 millones de habitantes.

Por esta razón, la industria se encuentra trabajando en vehículos autónomos que resuelvan las necesidades de transporte bajo los estándares del desarrollo sostenible. “Lo primero es la seguridad, lo segundo: el ruido”, dijo Casas sobre los temas a afinar.

El conferencista concluyó que estamos a puertas de una nueva revolución que comenzará una vez se descubra un nuevo método de propulsión, lo que disminuirá costos, pero, sobre todo, mejorará la calidad de vida de los seres humanos.

 

Por Leonardo Carvajalino

Más noticias