Lo que dice tu cuerpo sobre la felicidad

El 20 de marzo se conmemora el Día Internacional de la Felicidad, fecha en la que los especialistas destacan la importancia de este estado emocional en la salud mental de las personas.

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Expertos recomiendan bailar para estimular la hormona de la felicidad. En la foto de archivo, bailarines participan de actividad de Bienestar Universitario.

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19 mar 2021

Desde la psicología, la felicidad se entiende como un estado emocional positivo, que deviene de la experiencia de lograr satisfacer los deseos personales y alcanzar metas propuestas. Ese proceso de búsqueda y adaptación es el que se conmemora cada 20 de marzo como el Día Internacional de la Felicidad. Una fecha simbólica proclamada por la Organización de las Naciones Unidas, que busca reconocer la importancia que tiene la felicidad en el desarrollo y bienestar de los seres humanos.

Al ser un proceso químico cerebral donde intervienen hormonas como la dopamina, serotonina, endorfinas y oxitocina, se considera que la felicidad no es un estado perpetuo, sino que está determinado por muchos factores. Según Enrique Gutiérrez, psicólogo del Hospital de la Universidad del Norte, en el contexto actual que se vive por la pandemia, surge la necesidad de tener presente esos momentos que se consideran felices y, al mismo tiempo, se encuentran nuevas formas de llegar a ese estado. 

“La felicidad nos hace más eficientes, ayuda al buen estado del sistema inmunológico, mejora nuestra interacción social, así como nuestro autoconcepto. Todo dependerá del estilo de vida y de lo que cada persona defina sobre qué es ser feliz'', expresó el psicólogo.

Si bien es cierto que, según una encuesta global realizada por la asociación WIN en 2020, Colombia fue catalogado como el tercer país más feliz del mundo, la realidad es otra. La desigualdad, la corrupción y los altos índices de inequidad no permiten que este estado de plenitud sea una verdadera bandera para los ciudadanos de este territorio. Para María Fernanda Padilla, médica docente de la Especialización en Psiquiatría de Uninorte, nuestras reacciones a las situaciones externas se relacionan con la salud.

“Nuestras actuaciones están medidas por las emociones, cómo las interpretamos y respondemos ante ellas es lo que genera en nosotros una reacción que activa sustancias químicas que pueden llegar a alterar nuestra salud física”, afirmó la psiquiatra.

El Día de la Felicidad se conmemora a partir de la antigua historia del Reino de Bután, un pequeño país de la cordillera del Himalaya, al sur de Asia, que sugirió a la ONU celebrar este día gracias a que su rey decidió que la filosofía de su gobierno se basara en la felicidad de sus súbditos, creando el concepto de Felicidad Nacional Bruta (FNB), indicador que hoy día mide el nivel de vida complementando el Producto Interno Bruto (PIB).

En este contexto, la ONU en el año 2015 estableció los llamados Objetivos de Desarrollo Sostenible que promueven la felicidad como un derecho fundamental y exige a los gobiernos en el mundo que lo incluyan en sus políticas sociales y económicas, con el fin de alcanzar una verdadera equidad y bienestar colectivo. Los objetivos son, entre otros, erradicar la pobreza, reducir al mínimo la desigualdad en el mundo, cuidar y proteger el planeta.

Más que una fecha especial en el calendario, el Día Internacional de la Felicidad permite que todas las organizaciones alrededor del mundo se movilicen con innumerables estrategias para crear conciencia entre los ciudadanos y seguir en la incansable lucha por los derechos humanos, creando un espacio de reflexión, solidaridad, inclusión y esperanza, recordando a los líderes mundiales que es necesario seguir apuntando a mejorar cada vez más la calidad de vida en sus territorios.

De acuerdo con la psiquiatra Laura Páez, docente especialista en Psiquiatría de Uninorte, es una fecha para recordar que vale la pena trabajar por la elevación de los estados de bienestar general de uno mismo y de los demás. Por lo tanto, un día perfecto para dejar salir a flote la creatividad, recordar buenos momentos, hacer deporte, bailar y realizar esas acciones que generen placer, goce y disfrute.

“Cuando existe una situación de crisis se pueden elevar los niveles de ansiedad. Por eso recomiendo generar una atmosfera de felicidad alrededor o conversar sobre momentos vividos con felicidad, esto puede atenuar la sensación de desesperanza, logrando inyectar optimismo frente a la situación adversa”, recomendó la psiquiatra.

 

Por Katheryn Meléndez Solano.

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