Una muestra de arte en realidad virtual inaugura la XXX edición del Festival Cultural

La exposición Paisajes sonoros de Andrés Pupo te mira a los ojos como un león digital, literalmente. A través de unas gafas de realidad virtual, una de las piezas que fue mostrada en la inauguración de la XXX edición del Festival de la Cultural, combinó el tema de esta celebración del arte en el campus: la tecnología y la sinestesia, para hacer una pieza en la que se puede entrar ‘electrónicamente’, observar y caminar.

El resto de las paredes del lobby del edificio de posgrados servían de soporte para los collages de gran formato de Pupo en la noche del 22 de octubre, cuando oficialmente comenzaron las actividades del Festival de la Cultura. “La tecnología nos ha llevado a unos límites entre el tiempo y el espacio que a veces son demasiado vertiginosos. El arte también debe servir para aprender a contemplar y a sosegar la rapidez, y poder sentir”, dijo Deyana Acosta, directora del Centro Cultural Cayena y organizadora del evento que se realiza con el apoyo de Uninorte FM.

Las piezas de Pupo comunican con personajes históricos y paisajes que invitan a recorrer con la mirada y detallar cada uno de los elementos, puestos con “minuciosa precisión”, como lo describe Acosta. 

“Es una mezcla de diferentes culturas, de diferentes momentos históricos, interactuando y manteniendo un lenguaje íntimo de carácter simbolista”, puntualizó el artista plástico barranquillero.  

Su trayectoria comenzó en 2006, cuando se dedicaba a rescatar piezas de madera, desechos arrojados al mar en playas de Puerto Colombia. De ellas formaba muebles, “jugaba con piezas, insinuando animales y objetos”, detalló el hombre, quien es profesional en diseño de interiores. Esta experiencia del ensamble, la comenzó a aplicar y perfeccionar en el collage hasta que tomó la decisión de dedicarse tiempo completo al arte.

La pieza 3D

Los lentes de realidad virtual llevan al usuario a una rivera en la que se escucha el sonido del agua, animales moviéndose —un elefante barritando, unos pajaros que cantan a tu alrededor y el vuelo de mariposas—. Aun cuando el desplazamiento que se puede hacer dentro del mundo es corto, permite al receptor comprender la visión de tranquilidad y meditación en el que cada rincón se encuentra un elemento para contemplar. La pieza fue realizada por Blazing Soft, un estudio de videojuegos compuesto por egresados de Ingeniería de Sistemas de Uninorte.

“La intención de tener una puesta en escena con un dispositivo en tres dimensiones era generar un nuevo lenguaje en cuanto a una mezcla entre arte y tecnología que todavía no es muy bien visto. No está muy desarrollado, fue casi un experimento, con la intención de mostrar cuál era mi percepción de la obra”, explicó Pupo sobre la pieza que continuará durante el resto del Festival de Cultura, que termina el 26 de octubre, en el lobby del edificio de posgrados para todos los interesados.

La sinestesia y el Festival

“El Festival es una invitación a recuperar todos los sentidos que perdemos en los afanes de la vida”, comentó Paola Alcázar, directora de Extensión Universitaria, durante sus palabras al inicio de la ceremonia. Por su parte Acosta manifestó que la tecnología puede volver a sus usuarios “uniatencionales”, debido al enfoque visual que tiene. A través de la sinestesia buscan “que la gente sienta los olores, que pueda cerrar los ojos y escuchar e imaginar algo”.

Por esta razón, el campus universitario será el escenario para performances como Gaita loop de Bozá y Soplo divino de Alfonso Suárez. En las áreas verdes se realizarán picnics sonoros, el cineclub hará proyecciones de películas, las cafeterías serán escenarios para la poesía, en el auditorio se presentarán eventos de danza contemporánea y exposiciones en las paredes de los edificios. “A sus 30 años quisimos celebrar el festival con una apuesta a los sentidos”, cerró Acosta.

Por Leonardo Carvajalino