Innovación e investigación pedagógica, bajo la mirada de expertos

Representantes de instituciones educativas, organizaciones que trabajan por la educación, entidades del sector educativo del Atlántico y expertos académicos participaron el 9 y 10 de marzo en la Jornada de Intercambio de Experiencias de Innovación Pedagógica y de Investigación en Educación, organizada por la Universidad del Norte y el Centro de Innovación del Maestro (MOVA) de Medellín.

El evento comenzó con un conversatorio privado entre docentes del MOVA y del Centro para la excelencia Docente de la Universidad del Norte (CEDU) y el Observatorio de Educación, y continuó con el panel La innovación pedagógica y la investigación desde la política pública.

En este participaron Nestor Pérez, coordinador pedagógico del MOVA; Maribel Castro, líder de Evaluación de la Secretaría de Educación distrital; Anuar Pacheco, profesional de proyectos sociales de la Fundación Promigas; Fabián Padilla, docente de la Institución Educativa Distrital Jorge Nicolás Abello y ganador del Premio Compartir al Maestro 2016, y Eulises Dominguez, jefe del CEDU.

Moderados por el decano del Instituto de Estudios en Educación, Jose Alfredo Aparicio, los participantes discutieron a partir de sus experiencias lo que es y debe ser la investigación y la innovación pedagógica en la educación básica y media.

Mucha gente piensa que innovar es solamente crear algo nuevo o que nadie ha utilizado”, sostuvo Padilla, pero para él se trata de ser capaces de hacer cosas diferentes que tal vez otros ya han aplicado y ponerlas en práctica en contextos distintos para mejorar.

El docente puso como ejemplo el proyecto que lo hizo merecedor del Premio Compartir. “Este se basó en la enseñanza de contenidos y habilidad de otras áreas del saber en la enseñanza del inglés para mejorar las habilidades comunicativas de los estudiantes. Eso es lo que hacen todas las escuelas, la instrucción basada en contenidos, y a pesar de que no es nada nuevo, yo lo tomé y lo apliqué a un sector en donde difícilmente eso se da, el sector público, logrando así transformar la escuela y los procesos”, explicó.

Por su parte, Anuar Pacheco hizo hincapié en que hay “una ruptura en el paso de la educación básica y media a la educación superior” que tiene que ver con las apropiaciones y los aprendizajes de los estudiantes. “El estudiante no está apropiándose adecuadamente, no está desarrollando competencias para ese escenario futuro. En ese sentido, innovar implica propiciar ese escenario para que los estudiantes puedan posibilitar ese tránsito”, expresó, añadiendo que la finalidad de la innovación en este nivel académico es la de implementar procesos que faciliten el aprendizaje de los estudiantes.

En cuanto a la investigación, el coordinador pedagógico del MOVA explicó que esta debe ser algo inherente al proceso educativo en estos niveles. “Lo hemos mitificado porque hemos considerado que eso solo se puede dar en la universidad. Hay que empezar a llevar esos procesos de innovación y de investigación desde los primeros niveles, en los docentes y en los estudiantes más pequeños”.

Para Eulises Dominguez, jefe del CEDU, esto es un reto pues se ha encontrado evidencia de que dentro de la cultura institucional no la investigación ni el apoyo de la institución para hacerla. 

También señaló que los procesos de innovación en el aula no siempre están acompañados de estudios rigurosos sobre la efectividad de los mismos, cuando “lo ideal, desde la perspectiva en educación superior, es que al innovar debería haber procesos de investigación de aula” que permitan posteriormente brindar información que sea válida y confiable de todo el proceso a otros docentes.

El evento continuó el viernes con una conferencia introductoria sobre innovación e investigación pedagógica a cargo de la magister Margarita Osorio, una sesión de posters de los trabajos del MOVA y de estudiantes de la Maestría en Educación, una serie de mesas de trabajo coordinadas por Mauricio Herrón y una sesión de conclusiones y cierre.

Por Melissa Zuleta Bandera