La división de Ciencias de la Salud otorgó el título profesional a 117 estudiantes

Los nuevos profesionales de la salud que recibieron sus títulos profesionales este viernes, 30 de junio, ahora enfrentan la tarea más admirable del ser humano: salvar vidas y velar por la salud de los demás. Durante la ceremonia de grados realizada en el Coliseo Los Fundadores, los 117 graduandos asumieron este compromiso al recibir sus diplomas que los certifican como aptos para ejercer sus profesiones. 

Ante la presencia de las autoridades académicas de la institución, sus familiares y amigos, un total de 69 médicos, 13 enfermeros, 12 médicos especialistas (2 radiólogos, 2 pediatras, 3 oftalmólogos y 5 internistas), 18 enfermeros especialistas (9 en cuidado neonatal y el mismo número en cuidado crítico adulto), así como 5 magísteres (1 en epidemiología y 2 cada uno en ciencias básicas biomédicas y salud pública), celebraron la satisfacción de culminar una etapa más en sus vidas.

“Estoy convenida que después de estos años aquí ustedes han transformado su vida y, más importante, como profesionales de la salud, transformarán la vida de sus pacientes y sus familias”, expresó la directora académica del departamento de Medicina, Nelly Lecompte, quien presidió la ceremonia junto al vicerrector académico Alberto Roa Varelo, la secretaria académica Cristina Torrents y los directores de los distintos programas de la división.

“Los nuevos médicos y enfermeras hoy con su título adquieren el poder más grande que tiene un hombre, que es el de poder intervenir en la vida y la salud de los demás. Los graduandos de las especialidades llegan hoy a su formación terminal como médicos y enfermeras, con la responsabilidad de ser a partir de hoy referentes y el más alto escalafón de atención al que accede el paciente. Y los magísteres adquieren una responsabilidad de investigación y la toma de decisiones de nuestro sistema de salud”, agregó Lecompte.

Juana Borja González, directora del departamento de Enfermería, tomó juramento a los graduandos con el cual los nuevos profesionales se comprometieron a cumplir fielmente su profesión con honradez y lealtad, trabajar por el desarrollo de la región y el engrandecimiento de la Universidad del Norte.

Estudiantes reconocidos

La medalla de plata a la excelencia académica, reconocimiento principal que concede la universidad al graduando con el más alto rendimiento académico de su promoción, fue otorgada a Daniela Rojas Rodríguez del programa de Enfermería y a Jorge Molinares Carvajal de Medicina.

Molinares, quien fue beneficiario la Beca Mejor Icfes, la cual cubrió el 100% de su pregrado, fue el encargado de dar las palabras en nombre de los graduandos. Enfatizó en la responsabilidad que se avecina en el ejercicio de sus profesiones.

“Entramos en una etapa que exige un gran compromiso de parte de nosotros. Sin embargo, siento confianza al saber que estamos formados con la educación de una de las mejores universidades del país y, por ende, tenemos el impulso y el deber de ofrecer lo mejor de nosotros”, manifestó.

“La satisfacción y el sentimiento del deber cumplido son siempre proporcionales a los sacrificios, a la perseverancia y el esfuerzo. Nuestros años de estudio estuvieron llenos de desafíos y la superación de esas dificultades nos ha permitido construir este presente en el que vivimos”, añadió el joven médico.

Gaspar Del Río Pertuz, Juan Carlos Pérez Hernández y Frank Garnica Pacheco, todos del programa de Medicina, fueron merecedores del Diploma Graduando de Excelencia debido a sus sobresalientes rendimientos académicos durante todo su pregrado.

La mención de honor a mejor interno, reconocimiento que se otorga al graduando con el más alto promedio durante el internado realizado en el Hospital de la Universidad del Norte, fue para Youssef Daher Youhah, mientras que el diploma al mérito científico le fue concedido a Alexander Rodríguez San Juan, de la maestría en Ciencias Básicas Biomédicas.

Por Andrés Martínez Zalamea