Ludger Wessjohann charla sobre la importancia de una investigación científica sin sesgos

El director del departamento de Química Bioorgánica del Leibniz Institute of Plant Biochemistry compartió con estudiantes y profesores de la maestría y doctorado en Ciencias Naturales.

wessjohan.jpg
Ludger Wessjohann, director del departamento de Química Bioorgánica del Leibniz Institute of Plant Biochemistry, durante su visita.

Por:

16 sep 2019

Los sesgos que se presentan en las investigaciones de biología y química es una de las preocupaciones que ha atravesado el medio siglo de carrera de Ludger Wessjohann, director del departamento de Química Bioorgánica del Leibniz Institute of Plant Biochemistry. El académico, con más de 270 publicaciones y 20 patentes en el área de síntesis y aplicación de productos naturales en la medicina, visitó el 13 de septiembre Uninorte y habló con un grupo de estudiantes y profesores de la maestría y doctorado en Ciencias Naturales sobre cómo ha trabajado en su carrera, unificando las áreas de la química y la biología, y lo que ha aprendido para llevar a cabo una mejor investigación. 

Wessjohann señaló que mucha de la indagación científica que se realiza en el campo se concentra en áreas que son fácilmente accesibles o en las que ya otras personas han realizado estudios y se garantiza que se conseguirán resultados. Para el investigador, seguir esta tendencia no generará conocimiento trascendente en el contexto en el que nos encontramos, en el que hay una gran producción científica que crece exponencialmente. 

Otro de los aspectos que hacen que el clima de los estudios se dificulte es el hecho de que pocos investigadores reportan los resultados negativos de sus trabajos. “Son igual de importantes que los resultados positivos para entender el mundo desde la ciencia”, afirmó el experto.

Algunas de las iniciativas que apoya Wessjohann están relacionadas con un mejor uso de los buscadores de revistas científicas, con el apoyo de inteligencia artificial que estudia textos y correlaciona en su contenido las enfermedades de las que se hablan y los compuestos químicos estudiados para tratarlas. La clave está en utilizar todos los recursos disponibles para generar datos que no solo sean útiles para la investigación que se lleva a cabo, sino para el futuro del campo y la disciplina. 

Teniendo esto en cuenta, el científico propone una visión en la que es necesario el trabajo conjunto entre la química y biología para conocer y entender el hábitat y los organismos que en él existen y conectar este conocimiento de especies con su composición química. Wessjohann reconoce que es una labor ardua, que requiere de fondos y en la que habrá un tasa baja de componentes que sean potencialmente utilizables en el mundo farmacéutico, pero que la necesidad, especialmente en contextos de alta biodiversidad como el colombiano, yace en tener una aproximación estadística de lo que hay. 

En la medida que se haga este trabajo, se comenzará a responder una de las preguntas importantes que existen en la ciencia: la relación que hay entre diversidad de especies y componentes químicos. Es decir, químicamente, qué las hace diferentes y si estos compuestos tienen alguna utilidad desde la visión biomédica. 

Wessjohann anotó que es de gran importancia el estudio de los componentes naturales en el área de la medicina, debido a que, a diferencia de los producidos sintéticamente, tienen una mayor probabilidad de ser activos ya que han pasado por un proceso de miles o millones de años de selección natural y evolución. No es coincidencia que, por ejemplo, el 66 % de los componentes reactivos en drogas anticáncer son extraídos de productos naturales. 

La mayoría de estos medicamentos son producidos en Estados Unidos, Europa y Asia. “¿No hay productos naturales útiles en otros hábitats o es que no se está haciendo la investigación?”, se preguntó el experto. Uno de los aspectos que ha generado debate en el mundo de la medicina es la selva tropical como una de las fuentes del futuro de drogas para tratamientos. No obstante, en la actualidad, solo existen cuatro productos desarrollados con derivados de plantas de este hábitat. 

Wessjohann no descarta la posibilidad de que no exista una correlación entre diversidad biológica y química con componentes útiles en el mundo de la farmacéutica, pero afirma que existe la necesidad científica de responder a la pregunta. Y el deber está en las manos de todos. Para el invitado, la ciencia ya no es una tarea de individuos sino un esfuerzo colectivo. 

 

Por Leonardo Carvajalino

 

Más noticias