Maestría en Educación, 25 años formando verdaderos maestros

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Grupo de docentes del Atlántico becados para realizar la Maestría en Educación en Uninorte.

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01 feb 2017

Con una trayectoria de un cuarto de siglo y cerca de mil egresados, la Maestría en Educación de Uninorte celebra este 2017 su aniversario resaltando sus logros más importantes.

Creada en 1991 en socio con la Universidad Javeriana, hoy se perfila como la más completa de su tipo en el Caribe colombiano, evidenciado en los perfiles de los estudiantes que de ella se gradúan y el impacto que estos han tenido en colegios, universidades y centros de investigación.

“Muchos están en posiciones de alta responsabilidad como, son rectores y vicerrectores. Muchos de los mejores colegios de Barranquilla tienen egresados nuestros. El sello de la Maestría en Educación como programa de formación de docentes ha llegado a todos los rincones prácticamente de la costa. Hemos recibido estudiantes de Cesar, Córdoba, Magdalena, La Guajira, Bolívar y Atlántico. También hemos tenido estudiantes de Bogotá y de otras partes del interior del país, y de países como España y China”, cuenta Mauricio Herrón, coordinador del programa.

Para él, esta es la contribución del programa a la mejora en la calidad de la educación, con lo que concuerda el decano del Instituto en Estudios en Educación, José Alfredo Aparicio Serrano.

“Cuando inviertes en un estudiante para que se forme profesionalmente, sin duda estás generando un cambio social que probablemente tenga repercusiones en su familia cercana. Pero cuando inviertes a través de un docente, estás realmente generando una posibilidad de transformación a través de su labor que es de trabajo social y grupal. Un docente que tiene cursos de 15 a 40 niños está transformándolos a todos ellos si realiza una buena labor”, señala el decano. 

Esto lo logra con elementos diferenciadores como la calidad de su planta docente (con formación de maestría y doctorado), el mismo campus y los beneficios académicos y tecnológicos que brinda, el constante proceso de autoevaluación y restructuración para mantenerse al día con las demandas del contexto y las necesidades de los profesores de hoy y los diez énfasis que ofrece.

Estos, según explica Herrón, le da mayor dinamismo a la maestría en términos de formación “porque muchas veces los docentes no tienen claridad sobre lo que quieren hacer, y a través de los énfasis les damos unas líneas de acción e investigación en las que ellos pueden ejercer”. Considera que este elemento también permite que a la hora de ejercer puedan concretar esfuerzos para mejorar un aspecto puntual.

Pero sobre todo, el decano Aparicio considera que lo que hace única a la Maestría en Educación de Uninorte es el compromiso que tiene de formar maestros que no enseñen sino que eduquen.

“Lo primero es lo que hace solo un experto disciplinar que tiene un conocimiento y puede compartirlo con un aprendiz, mientras que educar en realidad ve todas las dimensiones del aprendiz, entiende que la labor del profesor no solamente es trabajar con un tipo de contenido en concreto (lo que el estudiante debe saber) sino con las otras dimensiones de ese sujeto”, señala.

Para él, este modelo de formación de formadores implica no solamente el volverles más expertos en algo, sino en volverles mejores personas, porque los maestros enseñan también con lo que son, hacen, dicen y piensan. “Les hacemos ver a los docentes su labor no como la de transmitir un conocimiento sino como la de crear, facilitar o promover las condiciones en las cuales el estudiante aprenda, y no solos saberes, sino también a cambiar como persona”.

Mirada hacia el futuro

Con los ojos puestos sobre lo que vendrá para la Maestría en Educación, Herrón considera que uno de los retos que enfrenta (que han tenido siempre como prioridad) es seguir adaptándose a los cambios del contexto y hacer que el currículo sea una respuesta a ello pero a la vez un faro.

“Ese es otro reto: cómo nosotros desde la Universidad y el programa proponemos una visión de formación de docentes ejemplar, de excelencia, de acuerdo con los estándares de calidad nacionales e internacionales. Que podamos seguir siendo el epicentro de formación docente de la costa y que podamos extender eso a nivel de país”, expresa el coordinador de la Maestría, quien también desea en el futuro ver una mayor articulación entre el programa, las escuelas y el Gobierno.

Libro conmemorativo

Como parte de la celebración de los 25 años de la Maestría en Educación, será publicado un libro a modo de síntesis de este cuarto de siglo de trabajo, en donde aparecerán desde información básica de cuántos egresados han sido y en dónde están, hasta datos indirectos como qué ha pasado en las instituciones y ciudades en donde estos profesionales ejercen su profesión.

Por Melissa Zuleta Bandera

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