Participar en ensayos clínicos: una forma de hacer el bien, sin mirar a quién

Cada 20 de mayo se conmemora el Día Mundial de la Investigación Clínica. El Centro de Investigación del HUN recuerda la importancia de la búsqueda de nuevas formas de tratamiento, diagnóstico y dispositivos médicos.

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Zilena Espiter, participante de estudio clínico para psoriasis, valorada por la doctora Beatriz Orozco, médico especialista en Dermatología, investigadora del CEI – HUN.

Por: Liliana Montoya

22 may 2023

A lo largo de la historia de la humanidad, científicos han necesitado comprobar la eficacia de nuevos tratamientos para prevenir o contrarrestar las enfermedades que afectan a millones de personas en todo el mundo. Los resultados de estas investigaciones generan tratamientos más efectivos y seguros, lo que impacta en la calidad de vida de las personas a nivel global.

Un ejemplo claro de ello son las vacunas, que al ser probada su eficacia mediante investigaciones —denominados ensayos clínicos— en la población, se ha logrado una considerable inmunización frente a enfermedades como varicela, sarampión, hepatitis y la poliomielitis. De hecho, la poliomielitis fue declarada eliminada del hemisferio occidental en 1994, gracias a un estudio iniciado en los años 40 por el virólogo estadounidense Jonas Salk, quien desarrolló un prototipo de vacuna evaluado en más de 2 millones de participantes.

Cada 20 de mayo se conmemora el Día Mundial de la Investigación Clínica, fecha donde se recuerda la importancia de la búsqueda de nuevas formas de tratamiento, diagnóstico y dispositivos médicos.

Un ensayo clínico es una evaluación científica de una vacuna, medicamento o dispositivo médico, que tiene diferentes fases de prueba para comprobar su seguridad y eficacia.  Hoy en día, los centros de investigación calificados para el desarrollo de ensayos clínicos tienen un papel fundamental para entender el efecto de intervenciones terapéuticas en seres humanos, generando conocimiento y el aval científico para la aprobación y producción de nuevos medicamentos.

La investigación, cada vez más cerca de la comunidad

El Centro de Investigación del Hospital Universidad del Norte (CEI_HUN), ubicado en la Calle 30 del municipio de Soledad - Atlántico, es una muestra de la vigencia e importancia de los ensayos clínicos y su integración con la comunidad y los grupos sociales. El CEI-HUN cuenta con un amplio portafolio de investigaciones académicas y ensayos clínicos de calidad de la industria farmacéutica para la prevención de enfermedades como la varicela, COVID-19, gripe causada por el virus de la influenza, dengue e infección respiratoria por el virus sincitial respiratorio.

También se realizan investigaciones para el tratamiento de enfermedades prevalentes en nuestra población, como la psoriasis, las enfermedades metabólicas incluyendo diabetes mellitus, obesidad y dislipidemia, hipertensión pulmonar y enfermedades cardiovasculares. 

De acuerdo con la doctora Silvia Aguilera, coordinadora Operativa del CEI-HUN, “la realización de investigaciones sin los debidos controles de calidad no solamente invalida sus resultados, sino que también puede afectar los cuidados de salud de nuestra comunidad. Las normas que estamos obligados a seguir quienes participamos en investigación están encaminadas a elevar la calidad tanto de los estudios clínicos que desarrollamos como de la prestación de servicios de salud que ofrece el Hospital”.

Equipo del CEI HUN: Donaldo de la Hoz, subdirector de Farmacia: Diego Viasus, infectólogo; Claudia Vásquez, subdirectora de Enfermería; Hugo Macareno, dir. científico; Silvia Aguilera, coordinadora Operativa; Lila Visbal, dir. Docencia Servicio HUN.


Al ser parte de una institución de salud de alta complejidad, los proyectos de investigación son liderados por especialistas médicos en dermatología, infectología, medicina interna, pediatría entre otras disciplinas, con el concurso de otras áreas como psicología, odontología, enfermería y farmacia. También participan en el área de investigación especialistas en la bioética, la salud pública, la epidemiología y la gestión integral de la calidad.

Todo lo anterior garantiza la integralidad de los procesos y el cumplimiento de las buenas prácticas clínicas internacionales y demás normas establecidas por el gobierno nacional, a través del Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos - Invima.

El 20 de mayo de 1747 el cirujano escocés James Lind inició el primer ensayo clínico de la historia al descubrir que la causa del escorbuto que afectaba a los marineros de la armada británica era la deficiencia de vitamina C”.

Participantes: una esperanza para la innovación en medicamentos, y tecnologías en salud

No existe otro camino más riguroso que el ensayo clínico como generador de posibilidades terapéuticas aplicadas al cuidado de la salud. La participación de individuos voluntarios para evaluar la respuesta del ser humano a diferentes tratamientos es una puerta hacia la esperanza. Una satisfacción moral que edifica. Lo admirable de quienes se unen a los proyectos de investigación es su decidida forma de hacer el bien, sin mirar a quién.

“Desde nuestro centro de investigación queremos expresar nuestro agradecimiento a los participantes de los diferentes estudios. Para nosotros significa mucho el poder conectar con voluntarios que nos brindan información valiosa para la innovación en función de la salud y el bienestar de tantas personas que hoy sufren enfermedades, algunas de ellas graves, incapacitantes y crónicas”, afirmó la doctora Aguilera.

El CEI-HUN cuenta con el respaldo del Comité de Ética en Investigación en el Área de la Salud de la Universidad del Norte, cuya principal función es salvaguardar la dignidad, derechos, seguridad y bienestar de quienes participan en investigaciones.

La participación de individuos voluntarios para evaluar la respuesta del ser humano a diferentes tratamientos, es una puerta hacia la esperanza. Una satisfacción moral que edifica. Lo admirable de quienes se unen a los proyectos de investigación, es su decidida forma de hacer el bien, sin mirar a quién”.

La experiencia desde el punto de vista de un participante

Zilena Espiter, de 36 años, participante en un estudio clínico para el tratamiento dermatológico de la psoriasis, afirma que ser parte de este proyecto de investigación le ha permitido acceder a la atención personalizada de profesionales de diferentes disciplinas, como dermatología, infectología, medicina interna e incluso psicología. Recibió un tratamiento con resultados y avances muy positivos en lo que respecta a su afección de la piel. “Yo comencé con psoriasis en casi todo mi cuerpo. Tenía ardor, picazón, dolor en las articulaciones. Con el seguimiento de mi caso en el Centro de Investigación el Hospital Universidad del Norte, bajo la supervisión de la dermatóloga Beatriz Orozco, he llegado tener una mejoría superior al 95%. Realmente me siento muy bien y mi mayor satisfacción es poder ayudar a que otros pacientes como yo puedan tener una mejor calidad de vida con tratamientos cada vez mejores. Por eso ha valido la pena ser voluntaria de este estudio”.

Si usted desea mayor información sobre los ensayos clínicos, puede ingresar a  www.hospitaluniversidaddelnorte.com  en la sección Centro de Investigación.

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