¿Qué debemos saber sobre la fauna de nuestro campus?

Seguramente alguna vez has sentido ese deseo, que tu mascota o cualquier otro animal hablara y pudiese expresar lo que siente. Ya lo hemos visto en algunas películas, que los animales tendrían mucho por decirnos y facilitaría nuestra relación con ellos.

Pero como pensar en eso es utópico, hemos aprendido a comunicarnos con ellos de diversas formas. En nuestro campus, por ejemplo, habitan muchas especies que diariamente podemos toparnos en nuestro andar, pero sin duda destacan los gatos, las iguanas y las cerca de 80 especies de aves que conviven entre nosotros.

Y como no todos somos expertos en biología o veterinaria, algunas relaciones pueden ser más complejas que otras. Por eso contactámos a tres abanderados de la fauna de nuestro campus para que nos cuenten sobre su hábitat, costumbres y, sobre todo, la convivencia con nosotros, los humanos.

Si los gatos hablaran…

Te dirían que pueden ser tan temperamentales como un humano, unos más cariñosos, otros más distantes, eso dice Norelli Schettini, docente del programa de Ingeniería Eléctrica y Electrónica y abanderada del programa Felinorte, que desde 2010 se ha preocupado por el bienestar y domesticación de los cerca de 70 gatos que habitan en Uninorte.

También te podrían decir que no están aquí por casualidad, que el campus ofrece condiciones aptas para su supervivencia y su intención no es afectar tu tranquilidad, a pesar de haber vivido situaciones muy difíciles en el campus. “Cuando el programa inició no había un control sobre la natalidad de los felinos, algunos estaban en estado de desnutrición y la mayoría estaba en un estado feral (no domesticado), lo cual facilitaba accidentes con los estudiantes”, recuerda Norelli.

Por eso la labor de cuidado consistió en vacunación, esterilización y socialización de los gatos de la universidad. El principal desafío ha sido enfrentar el abandono de otros gatos en el campus, “creen que somos una fundación y pueden dejar a todos los gatos que quieran a nuestro cuidado, pero no es así”, manifiesta Schettini, quien dice que esto también tiene implicaciones en la reproducción y la convivencia de los otros felinos porque se presentan disputas por el territorio y desplazos en las colonias ya conformadas.

Las relaciones con los estudiantes es de las más cercanas, muchos los acarician y consienten en sus ratos libres, incluso otros les dan comida, acto que Schettini no recomienda porque genera un mal hábito en los animales que luego puede incomodar a otros.

Una buena forma de contribuir sería participando de las actividades que prepara Felinorte y los programas de apadrinamiento o adopción. En el primero eres responsable de un gato aunque este continúe viviendo en el campus y en el segundo adoptas a un fiel amigo en tu hogar.

¿Qué nos dicen las aves con su canto?

Al no ser animales terrestres podría decirse que la pasan mejor entre los humanos, 2875 árboles de nuestro campus son el hogar perfecto para cerca de 70 especies de aves, entre residentes y migratorias, que con su canto armoniza los amaneceres en Uninorte.

Francisco Velásquez, docente del departamento de Química y Biología, se ha dedicado durante años a investigar y conocer sobre aves, junto a la profesora Juanita Aldana, ejecutan estrategias como la electiva de ‘Aves del Caribe Colombiano’, en la cual sensibilizan a los estudiantes sobre estos animales y su importancia.

“Esto nos ha permitido desarrollar actividades como el programa de avistamiento de aves y salidas de campo en la región, para que los estudiantes conozcan más de aves”, menciona el profesor Francisco.

La señalética en Uninorte como territorio de aves es unas de las nuevas estrategias que han desarrollado para complementar la idea de ‘Museo Vivo’ que se lidera desde el programa de Ecocampus, para que propios y visitantes conozcan a mayor detalle sobre las especies que allí habitan y los lugares donde se pueden encontrar.

Uno de los pocos problemas que hoy enfrentan las aves en nuestro campus son los vidrios que reflejan el paisaje de los jardines y provocan que las aves choquen —muchas veces con resultados fatales— con los vidrios. Por eso ya están trabajando en un modelo que presentarán ante la vicerrectoría para que los vidrios tengan una señalización especial y eviten estos accidentes.

La convivencia con los gatos es de las más difícil, por instinto son presa y cazador, pero gracias a la labor de Felinorte y el cuidado el profesor Francisco y Juanita, brindan a las aves, se ha mantenido un equilibrio.

Es por eso que con su canto, las aves de Uninorte no hacen más que manifestar su felicidad por estar en un lugar lleno de árboles, flores y espacios para convivir con tranquilidad.

Es el momento de las iguanas

Una situación lamentable unió a Paige Poole, profesora del Instituto de Idiomas, con las iguanas de nuestro campus. Hace algunos años se encontró con una malherida en uno de los parqueaderos a raíz de un accidente. No había personas para socorrerla ni la información necesaria para hacerlo, por eso a partir de allí Poole, decidió redireccionar su interés por el medio ambiente, hacia las iguanas.

Actualmente no hay un número determinado de iguanas en el campus, ellas se reproducen y tienen todo lo necesario para vivir tranquilas. Su única amenaza, nosotros, los humanos. La profesora Poole explica que por instinto, estos animales no buscan una interacción con los humanos, no son agresivas pero usualmente corren si están cerca a una persona.

Hoy las iguanas te piden que la próxima vez que enciendas tu carro revises por debajo y por arriba si no hay alguna a la que podrías lastimar. “El principal inconveniente con las iguanas son los accidentes con los vehículos, solo este año se han reportado cerca de 10 accidentes en los que muchas veces mueren”, explica Poole.

Y es que al no tener una temperatura estable todo el tiempo están en medio del asfalto, buscando calor, o debajo de los carros buscando sombra, por eso son tan inquietas y es nuestro deber revisar.

Si definitivamente tienes fobia a estos réptiles, estar alerta es tu mejor prevención, rodearlas siempre será una opción. Por eso al caminar por el campus observa tu alrededor para que veas a tiempo si una iguana está en tu camino. Recuerda que fue el campus el que creció en medio de su hábitat natural y hoy debemos garantizar su bienestar.

En el ecosistema son importantes para dispersar semillas en el campus, y cumplen su papel biológico en el bosque seco tropical. Además los visitantes perciben a las iguanas como amigos exóticos del campus a los que quieren fotografiar y conocer.

Por Omar David Alvarez