100 años del natalicio del artista que retrató la realidad caribe al mundo
Un grupo de conocedores de la obra de Alejandro Obregón dialogaron sobre su vida y obra, y lo que significó este artista para el arte contemporáneo de Colombia y su internacionalización.
El 4 de junio, Alejandro Obregón, uno de los artistas colombianos más importantes del siglo XX, cumpliría 100 años. Para conmemorar esta fecha especial, desde el Centro Cultural Cayena de la Universidad del Norte se organizó el conversatorio "¿100 años después, por qué es importante Obregón?".
El evento, que se llevó a cabo vía YouTube, contó con la participación de los curadores Álvaro Medina, Isabel Ramírez y Sylvia Suárez, y tuvo a Tony Celia, director de Cayena, como moderador. Durante hora y media, los especialistas debatieron sobre Obregón, el impacto que tuvo a nivel local, regional, nacional y continental, y cómo se observa su obra hoy en día.
Ramírez manifestó que ve el impacto de Obregón desde tres aspectos. En primera instancia, la importancia y potencia de su obra que se sigue interpelando hasta el día de hoy. También resaltó su influencia como gestor e interlocutor intelectual, que fue muy importante para su generación, pues hizo parte de un grupo que ayudó a consolidar toda una institucionalidad del arte en la región Caribe y en todo el país. Y, por último, destacó su figura como un emblema del artista moderno, un concepto que no existía en la región Caribe y le abrió las puertas a generaciones subsiguientes.
Suárez complementó que la obra de Obregón también habló en una coyuntura política muy compleja, la segunda mitad del siglo XX en Colombia, y de articular repertorios visuales muy distintos para transfigurar los temas de interés nacional a lo humano. “Fue un agente movilizador de la crítica frente a un establecimiento y una búsqueda de la reconquista de las libertades democráticas”, afirmó.
Los especialistas concordaron en la noción de que Obregón utilizó el caribe como un punto de partida para explorar lo universal. Medina señaló que al pintor “no le interesa el paisaje sino lo que está detrás (...) Le interesa poner en escena desde lo pictórico, las fuerza y tensiones que están implícitas en la naturaleza”. Obregón, en entrevistas y diversos diálogos, afirmó que no le gustaba representar la realidad tal y como la veía, sino que su pintura la llevaba a cabo en un proceso de “absorber” la realidad y convertirla en pintura.
Una de las características que potenció la versatilidad que se vislumbra en sus pinturas es la fluidez. Según Ramírez, su obra nos deja ver una modernidad muy particular que mezcla lenguajes modernos con la gran tradición artística barroca que era muy importante en el siglo XIX y XX en el país, y en el caribe. Así también se nutrió de un círculo artístico muy activo entre los que se encontraban reconocidos personajes como Edgar Negret, Enrique Grau y Eduardo Ramírez Villamizar, Cecilia Porras, entre otros.
De acuerdo con Medina, Obregón fue la figura prominente de lo que llamó la generación más importante de la pintura en el país. No obstante, lamentó que su trabajo no tenga la visibilidad que merece tanto nacional como internacionalmente. Los tres panelistas contaron que han pasado años de sus vidas en la búsqueda de originales de Obregón, en una labor que se asemeja más a la arqueología que a la curaduría, debido al tipo de coleccionismo que ha existido en el país.
A esta dificultad por encontrar y estudiar su obra, le añadieron que no ha habido disposición institucional para rescatarla. Otros artistas de una dimensión e influencia similar, como Fernando Botero, han recibido mucho mayor reconocimiento que Obregón, a pesar de que el segundo, de acuerdo con Suárez, fue la matriz creativa de los más grandes artistas del país durante cuatro décadas.
“La mejor manera de celebrar a estos personajes es volviendo sobre la obra, enfrentándose a ella, analizándola, hay que seguir haciéndole preguntas. (...) que trasciendan esas lecturas que han derivado en una mirada superficial”, complementó Ramírez.
Becas Alejandro Obregón
Con motivo del centenario de su vitalicio, la Universidad del Norte abrió la beca Alejandro Obregón para jóvenes de excelencia. La beca cubre hasta el 100 % del valor de la matrícula de pregrado e idiomas; el porcentaje de la beca dependerá del análisis de los requisitos académicos y las condiciones socioeconómicas familiares del aspirante.
Por Leonardo Carvajalino
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