Voluntarios de Alemania hicieron un recorrido por el Ecocampus

Diez jóvenes de Hamburgo, Alemania, que hacen parte de la Asociación Juvenil Internacional Europa – Latinoamérica (IJEL), conocieron la fauna y flora del bosque seco tropical en un recorrido por Uninorte.

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Los voluntarios sembraron cinco muestras de ceiba roja en el Aula Viva.

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14 ago 2019

Diez jóvenes de Hamburgo, Alemania, que hacen parte de la Asociación Juvenil Internacional Europa – Latinoamérica (IJEL), conocieron el 13 de agosto la fauna y flora del bosque seco tropical en un recorrido por Uninorte. En la actividad llevada a cabo por Ecocampus y Univoluntarios, que en conjunto con la organización Ayudando gestionaron el intercambio, los visitantes sembraron cinco semillas de ceiba roja, regaron y fumigaron el Aula Viva y conocieron diferentes aspectos sobre los ecosistemas de nuestra región. 

“Es muy diferente comparado al ecosistema del norte de Alemania, de donde vengo yo. Es mucho más diverso y tiene muchas especies. Es muy especial conocerlo”, dijo Leo Muller, uno de los estudiantes de intercambio que estarán en el país hasta el 27 de agosto. Los jóvenes llegaron para hacer proyectos sociales en torno a temas de medio ambiente y sostenibilidad. 

El guía fue Haver Herrera, apoyo técnico de Ecocampus, quien no solo les indicó cuáles eran las muestras que hay en el campus de roble amarillo, ceiba blanca o las iguanas y gatos, sino también el conocimiento relacionado al contexto social y ambiental que cumplen en nuestra región. Por esto escogieron sembrar la ceiba roja, una especie que está en peligro y que es comúnmente utilizada para hacer las máscaras del Carnaval. 


El grupo de visitantes junto a Javer Herrera y miembros de Univoluntarios. 

Marlon Holzberger señaló que es importante conocer otras culturas y otras formas de vida. “Nos hemos encontrado con muchas ideas de cómo hacer una vida mejor en el mundo y se ve reflejado en la Universidad, en Ecocampus”, afirmó. El joven complementó que le pareció novedoso cómo desde la academia se pueden fomentar iniciativas de conservación de biodiversidad, un enfoque que no había experimentado en su país. 

Los diez visitantes hicieron paradas en algunas de las 37 señales que hacen parte del Museo Vivo. La jornada terminó en el Aula Viva, donde los jóvenes conocieron la iniciativa, sembraron cinco semillas de ceiba roja y fumigaron los mangles que allí se conservan como un proyecto para repoblar el Parque Isla Salamanca. 

 

Por Leonardo Carvajalino

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