Por una vida universitaria libre de toda forma de violencia

Desde de 2020 la Universidad adoptó una cuenta con una ‘Declaración, política y protocolo contra toda forma de violencia y acoso’. Desde entonces, distintas áreas académicas, administrativas y de apoyo han realizado diversas iniciativas para dar a conocer el alcance de la misma y su ruta de atención.

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18 mar 2022

Desde julio de 2020 la Universidad adoptó una cuenta con una ‘Declaración, política y protocolo contra toda forma de violencia y acoso’. Desde esa fecha, distintas áreas académicas, administrativas y de apoyo han realizado diversas iniciativas para dar a conocer el alcance de la misma y su ruta de atención.
 
El objetivo de la declaración, que recoge los lineamientos que ya existían en la Universidad y que incorpora otros para ampliar su impacto y pertinencia, es promover la sana  convivencia entre los miembros de nuestra comunidad universitaria, bajo los principios y valores institucionales y con garantía plena de los derechos y libertades que se reconocen en la Constitución y la ley.  
 
“La declaratoria pública de cero tolerancia a todo tipo de violencia y acoso, las campañas de socialización que hemos adelantado con profesores, colaboradores y estudiantes, nos han permitido dar atención a los casos, por una parte y por la otra, también nos ha llevado a identificar oportunidades de mejora tanto en la forma como en el contenido de la política y sus instrumentos”, asegura Joachim Hahn, vicerrector Académico, quien destaca que la articulación con la Línea Ética ha  permitido a los afectados manifestarse con todas las garantías de la discreción y profesionalismo en el manejo de sus casos. “Aunque por razones de privacidad no podemos divulgar cifras ni nombres, sí podemos afirmar que hemos sancionado a quienes en el debido proceso han sido responsables, atendido a las víctimas y tomado decisiones fundamentales para seguir construyendo entre todos una cultura organizacional de respeto, armonía, solidaridad, alrededor del rechazo categórico a todo tipo de violencia”, concluye. 

Partiendo del reconocimiento del otro, de sus libertades de expresión y opinión y también de sus deberes, la política de cero tolerancia sobre toda forma de violencia y acoso categoriza sus distintas formas, articula las medidas de prevención y rutas de atención existentes, brinda protección y acompañamiento a quien lo requiera y establece medidas administrativas y disciplinarias para sancionar infracción, si así lo determina el debido proceso, a cualquiera de los miembros de la comunidad universitaria. Lo dispuesto permite, por una parte, dar prioridad a la atención de los denunciantes mediante la activación de una ruta de atención y por otra, iniciar los procesos disciplinarios respectivos, los cuales están sujetos en todo caso, a los principios constitucionales del debido proceso y el respeto al derecho de defensa.
 
“Aquí comprendemos y aceptamos la diversidad de razas, religiones, géneros, creencias, afiliaciones políticas, procedencias, y acogemos con respeto toda manifestación de diversidad. Además, incluimos a otros seres vivos en la conceptualización de la no violencia. Es decir, queremos que nuestra cultura organizacional adopte una postura de no agresión y maltrato a animales, plantas y ecosistemas, lo cual representa una apertura a tendencias mundiales de gran valor e impacto”, puntualiza el vicerrector.

Un proceso de educación y construcción permanente

Si bien existe un ambiente de respeto y empatía en la comunidad universitaria, es una tarea constante seguir trabajando por la tolerancia, la diversidad y la inclusión. Por ello desde Bienestar Universitario, por ejemplo, se trabaja en la pedagogía en las distintas formas de violencia y acoso, y para el manejo del lenguaje no discriminatorio, incluyente y de fomento de la denuncia, de manera que la política sea un “cuerpo vivo” que sea reflejo de una obra colectiva en construcción permanente, un proceso para contribuir a la generación de una cultura institucional de respeto y buen trato. La comunidad uninorteña puede discutirlo, analizarlo y aportar a su continuo mejoramiento.

“Invito a todos aquellos miembros de la comunidad que quieran hacer aportes, críticas constructivas, recomendaciones, a que lo hagan con la certeza de que serán siempre bien recibidas, analizadas e incorporadas cuando así se requiera”, señaló el vicerrector Hahn. Las personas que quieran contribuir con propuestas para la creación de mensajes y campañas de sensibilización de la política, pueden escribir a bie-univ@uninorte.edu.co y compartir sus ideas y propuestas. 
  
¿Cuál es la ruta de atención en casos de violencia, acoso o discriminación?
En la Universidad contamos con diversos mecanismos e instrumentos para la formulación de la denuncia como la línea ética y dispone de un conjunto de instrumentos que buscan garantizar la protección y apoyo a las eventuales víctimas.
 
* De forma presencial, ante Bienestar Universitario, ante los directivos de la respectiva División (decano, director de departamento y coordinador de programa) o ante directivos de la Institución (rector, vicerrectores, secretario académico, secretario general o director de Gestión Humana).

* De manera telefónica o virtual. Para estos fines, la Universidad cuenta con una línea de atención ética a cargo de Ethic Global, la cual se encarga de recibir las denuncias o reportes de cualquier conducta irregular, incluidas las relativas a violencia, acoso y discriminación. Si la denuncia es telefónica se puede hacer a la línea 01 800 7522400. También se puede acceder al enlace que aparece en la página institucional: www.uninorte.edu.co, lineaeticauninorte.ethicsglobal.com

* Presentarla de forma anónima al Comité de Convivencia Laboral o a los miembros del Comité de Ética y Conflicto de Intereses: convlaboral@uninorte.edu.co.

Una vez recibida la denuncia, se presenta el informe a los miembros del Comité de Ética y Conflicto de Intereses, el cual procede a activar la ruta de atención. Si la denuncia involucra a empleados o docentes de la Universidad y es formulada directamente por la víctima, se da traslado al Comité de Convivencia Laboral, creado mediante Resolución rectoral No. 92 de noviembre 16 de 2012. Dicho comité tiene a su cargo escuchar a las partes, crear espacios de diálogo y formular planes de mejora; así como hacer seguimiento a su implementación y cumplimiento. En caso de que la denuncia sea hacia un estudiante se inicia un proceso disciplinario encargado de escuchar a las partes. 

Conozca aquí todo el contenido de la Declaración, política y protocolo contra toda forma de violencia y acoso.
 

 

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