Las apuestas para
un campus de
calidad y bienestar



 

Por Redacción OE
 

Año tras año, la Universidad del Norte continúa evolucionando en la carrera para continuar siendo una institución de excelencia. Uno de los elementos importantes para alcanzarla, según manifestó el rector Adolfo Meisel, es “tener un entorno de calidad, de bienestar que enaltece y facilita la vida de nuestros estudiantes”. Con esto en mente, las nuevas apuestas en infraestructura de Uninorte buscan llenar de vida y enaltecer los posibilidades del campus
 

Proyectos como el edificio de Ciencias e Idiomas, la piscina, la Casa de Estudio Alfredo Correa de Andréis y la fuente de la Rectitud, Alegría y Verdad representan espacios que buscan el desarrollo de la comunidad universitaria en diferentes ámbitos que van desde lo académico hasta lo personal. “Nos estamos apegando mucho a esta nueva visión que es consecuencia de un análisis que hemos construido a través de los procesos de autoevaluación”, anotó Carla Fernández, directora de la Oficina de Planeación. Agregó que el esfuerzo que se hace, tanto desde la oficina que maneja, como desde los diferentes departamentos académicos, permite que las nuevas edificaciones cuenten con tecnología de la más alta calidad y conocimiento y experiencia para mantener el costo de diseño, construcción y operación a su mínima expresión.
 
 


Casa de Estudio Alfredo Correa de Andréis Diseñado con el objetivo de ser el primer edificio certificado LEED (Leadership in Energy & Environmental Design) en el país,
la Casa Estudio Alfredo Correa de Andréis ya se encuentra en etapa avanzada y se espera que esté funcionando en febrero de 2020. La edificación ubicada al lado de la Biblioteca Karl C. Parrish tendrá una capacidad para 458 personas en los diferentes salones y espacios de estudio que componen sus tres pisos.
Para lograr la certificación, el edificio contará con una alta eficiencia energética, y aprovechará su fachada monolítica para dejar entrar la luz natural. Así también está pensado para aislarse de la contaminación acústica de la 51B, y con sistemas de automatización de aire para controlar los niveles de monóxido de carbono.
Según explicó Carlos Clavijo, director de Servicios Administrativos de Uninorte, los espacios interiores están diseñados para que haya zonas de estudio que posibiliten tanto el trabajo individual como el colectivo con sillas y escritorios reconfigurables. En un principio, se había proyectado como un apéndice de la Biblioteca KCP, pero se repensó para ser un lugar propio que fuese un complemento al eje central del conocimiento en Uninorte y que respondiera a las necesidades de los diferentes comunidades.

 

 

 
Edificio de Ciencias e Idiomas
Los 10.711m2 de construcción estarían listos para julio de 2020 y ayudará a surtir las necesidades académicas de las divisiones de Ciencias Básicas e Idiomas. El edificio de ocho pisos está ubicado en la zona noroccidental del campus, al lado del Bloque K. “Tiene una estructura simétrica que habla de la geología, de idiomas, en un entorno muy verde, de fácil acceso”, explicó el arquitecto Mauricio Tinoco, uno de los encargados del diseño.

El concepto arquitectónico gira en torno a la flexibilidad, y por esto la estructura tendrá muchos acabados a la vista para que sea de fácil mantenimiento y muy durable. En el último piso, el edificio tendrá un restaurante que se llamará Bocas de Ceniza y tendrá vista al río.

Características del edificio 1. El semisótano serán dos laboratorios de Geología.
2. Los primeros tres pisos, 28 aulas de clase para pregrado de 40 estudiantes.
3. Los pisos 4 y 5: Laboratorio de Arqueología, Educación, Comunicación Social, Matemáticas y salas informáticas.
4. Pisos 6, 7 y 8. Oficinas para profesores, espacios cerrados y colaborativos para los profesores. 70 Oficinas de Profesores, 2 Decanaturas con oficinas para staff y asistentes, 9 Oficina para el Departamento de Lenguas, 7 Oficinas para Coordinación de Posgrados, 12 Puestos de trabajo para asistentes graduados. Terraza: Restaurante Bocas de Ceniza.



 





Piscina, gimnasio, sala meditación, sala de danzas, aeróbicos, sala ensayos musicales
El nuevo edificio, que aún no ha comenzado su etapa de ejecución, estará ubicado al lado del parqueadero 10. Los casi 3.000 m2 de construcción estarán separados en dos pisos y un sótano. La construcción está rodeada de un ojo de agua y con iluminación que refleja sobre la fachada del edificio. Las afueras serán intervenidas para ser sitios que cualquiera pueda disfrutar, con zonas de estar donde se pudieran desarrollar otras actividades alternativas.
La protagonista de la edificación será la piscina, ubicada en el primer piso. Será de dimensiones semiolímpicas, es decir de 35 metros de largo por 20 metros de ancho. El propósito es que sea formativa y por esto tendrá 1.50 metros de profundidad. El espacio estará dotado con varias ventanas para permitir la entrada de luz natural, incluyendo un techo con cubierta traslúcida, que a su vez extiende los tiempos de disfrute del espacio y protege a los usuarios de condiciones climáticas adversas. En el segundo piso estarán ubicados un gimnasio, un aula de clase donde cabrán 40 estudiantes para instrucción a deportistas, una sala de meditación, sala de danza, y de ensayos musicales. Además, el edificio contará con una cafetería, y zonas de vestidores, asistencia, enfermería y terapia física. Aún no se tiene un tiempo estipulado de entrega, no obstante, el arquitecto Tinoco afirmó que se pensó en un diseño simétrico para que una vez entre en etapa de ejecución, sea ágil el proceso de construcción.

 



 


Fuente de la rectitud, alegría y verdad
La fuente ‘Rectitud, Alegría y Verdad’, estará localizada en la plazoleta entre el Du Nord Plaza y el edificio de Posgrados Álvaro Jaramillo Vengoechea. Su nombre surge de las palabras del himno de Uninorte, escrito por la reconocida poetisa barranquillera Meira Delmar. Tendrá nueve metros de diámetro, con acabados compuesto por granito lavado, estará bordeado por bancas de concreto, y en el centro estará inscrito el nuevo sello institucional.
La nueva construcción, que se espera que comience a funcionar hacia finales del segundo semestre del 2019, está enmarcada dentro del programa Arte y Cultura en el Campus, iniciativa del rector Meisel que tiene como objetivo abrir espacios en el campus para que los estudiantes puedan disfrutar y desarrollar sus sensibilidades artísticas.